Los diputados Diego Ibáñez y Carolina Tello han presentado una solicitud formal a la Comisión de Ética y Transparencia de la Cámara de Diputados, exigiendo sanciones contra el diputado Miguel Mellado por su desempeño como presidente de la Comisión Especial Investigadora (CEI) del Caso Monsalve.
Según los legisladores, Mellado habría incurrido en una serie de irregularidades durante las sesiones de la CEI, incluyendo impedir que los invitados expusieran sus puntos de vista de manera completa, realizar afirmaciones falsas sobre el jefe de asesores del Segundo Piso, Miguel Crispi, y terminar abruptamente algunas sesiones.
Acusaciones de Parcialidad y Abuso de Poder
Ibáñez y Tello señalan que estas acciones de Mellado contravienen los deberes establecidos en el Reglamento de la Cámara de Diputados, específicamente en lo referente a la fraternidad, la conducta acorde a la investidura y el respeto hacia los demás diputados y funcionarios públicos.
El diputado Ibáñez calificó la conducta de Mellado como «un verdadero desastre», afirmando que «no solo pisoteó los principios de imparcialidad y debate democrático, sino que también impidió que las sesiones se desarrollaran adecuadamente, limitando el derecho de los invitados a exponer sus puntos de vista».
Por su parte, la diputada Tello señaló que «el diputado Mellado tuvo una conducción cuestionable, donde la imparcialidad brilló por su ausencia y no honró su palabra. Ni los invitados ni sus propios pares se libraron de su falta de respeto».
Solicitud de Sanciones y Resguardo de la Institucionalidad
Ibáñez y Tello han solicitado que se apliquen las medidas disciplinarias correspondientes y se sancione a Mellado, con el fin de «resguardar la institucionalidad legislativa y la correcta aplicación del ordenamiento jurídico».
Según los legisladores, la actitud de Mellado fue «inaceptable como presidente de la comisión» y merece ser sancionada, ya que su conducta «fue en ocasiones un verdadero show donde se extralimitó en su poder, imponiendo sus opiniones de forma dictatorial, sin respetar las voces de los demás, y desinformando a la opinión pública».
