Una investigación interna en la Fiscalía Nacional ha destapado presuntas irregularidades en la compra de un software de vigilancia durante la gestión del exfiscal nacional Jorge Abbott. El fiscal José Morales, de la Fiscalía Centro Norte, encabezó un operativo este viernes en la sede de la Fiscalía Nacional en Santiago, donde incautó el teléfono de un funcionario histórico de la institución.
La adquisición del software cuestionado se habría realizado con el objetivo de ejecutar medidas intrusivas en investigaciones, pero según declaraciones de un funcionario, «no habría entregado los resultados esperados». Esto habría motivado una investigación administrativa, cuyos antecedentes derivaron a la Fiscalía Centro Norte, quedando Morales a cargo del caso.
Allanamiento y Recopilación de Pruebas
Durante el allanamiento, los testigos describieron «sorpresa» entre los trabajadores al ver a Morales operando en las oficinas de calle Catedral. La incautación del dispositivo móvil se enfoca en recabar pruebas sobre posibles irregularidades en el proceso de licitación y uso del programa adquirido.
Críticas Internas por Alto Costo y Bajo Rendimiento
Según la información revelada, el software adquirido bajo la gestión de Abbott generó críticas internas por su alto costo y bajo rendimiento. Esto habría llevado a cuestionar la eficacia y la transparencia del proceso de adquisición de dicha herramienta tecnológica.
La investigación busca esclarecer si hubo irregularidades en la compra y uso de este software de vigilancia, que no habría cumplido con las expectativas de la Fiscalía Nacional, señaló una fuente cercana al caso.
Implicaciones y Próximos Pasos
La acción de la Fiscalía Centro Norte forma parte de una investigación más amplia sobre la presunta compra irregular del software de vigilancia. Las autoridades esperan que el análisis de la información incautada y la recopilación de testimonios permitan esclarecer los hechos y determinar si hubo responsabilidades en el proceso de adquisición de esta herramienta tecnológica.
Este caso ha generado preocupación y cuestionamientos dentro de la Fiscalía Nacional, poniendo en tela de juicio la transparencia y la eficiencia de los procesos de contratación y adquisición de herramientas tecnológicas utilizadas en las investigaciones.
