La comunidad de Cabo Blanco en Valdivia, región de Los Ríos, se enfrenta a un desafío apremiante: la intermitencia en el suministro de agua potable debido al término de la vida útil del único pozo que abastece a la zona. Esta situación está afectando a cerca de 170 familias que habitan en el sector, quienes se ven obligadas a adaptarse a un servicio irregular y limitado.
Según la presidenta del comité de Agua Potable Rural (APR) de Cabo Blanco, Patricia Rosas, el problema se originó porque el único pozo habilitado está cumpliendo su vida útil, lo que provoca que se ensucie y no se pueda extraer más agua al estanque. Como resultado, el recurso se está entregando de manera intermitente, en horarios específicos a lo largo del día, dejando a las familias sin agua durante la noche.
Buscando Soluciones Sostenibles
Ante esta situación, la comunidad y el comité de APR han planteado una solución a la Dirección de Obras Hidráulicas del Ministerio de Obras Públicas (MOP): limpiar el pozo existente y habilitar uno nuevo. Esta alternativa permitiría entregar un suministro de agua potable más confiable y constante a los hogares de Cabo Blanco.
La solución es limpiar el pozo y habilitar uno nuevo, con el fin de entregar el suministro a las viviendas ubicadas en el sector
, explicó la presidenta del comité de APR.
Sin embargo, según la información proporcionada, el MOP aún no ha concretado esta propuesta debido a la falta de recursos. Pese a ello, la entidad confirmó que se reunirá con la comunidad para buscar soluciones al problema que mantiene con intermitencia la entrega de agua potable en Cabo Blanco.
Innovando en la Gestión del Agua
La situación en Cabo Blanco es un claro ejemplo de los desafíos que enfrentan algunas comunidades rurales en Chile en cuanto al acceso y la calidad del agua potable. Sin embargo, esta crisis también representa una oportunidad para implementar soluciones innovadoras y sostenibles, que no solo resuelvan el problema a corto plazo, sino que también garanticen un suministro confiable a largo plazo.
Algunas alternativas que podrían explorarse incluyen la implementación de sistemas de captación y almacenamiento de agua de lluvia, la instalación de plantas de tratamiento de agua o la exploración de fuentes de agua subterránea adicionales. Además, la educación y concientización de la comunidad sobre el uso eficiente del agua pueden ser estrategias clave para abordar este desafío de manera integral.
En resumen, la situación en Cabo Blanco es un llamado a la acción para que las autoridades y la comunidad trabajen de manera conjunta en la búsqueda de soluciones innovadoras y sostenibles que garanticen el acceso al agua potable, un recurso vital para el bienestar y el desarrollo de las familias.