José Antonio Kast, candidato presidencial de Republicanos, se ha pronunciado en contra de la pena de muerte en Chile, argumentando que la cadena perpetua es una alternativa más efectiva y humana. Según Kast, la cadena perpetua es la «muerte en vida» para los delincuentes, ya que los aísla completamente de la sociedad de por vida, resguardando sus derechos básicos pero manteniéndolos alejados.
Kast señaló que Chile firmó el Pacto de San José de Costa Rica, bajo el cual no se puede restablecer la pena de muerte una vez que ha sido abolida, lo cual ocurrió en 2001 durante el gobierno de Ricardo Lagos. Sin embargo, en la justicia militar aún se contempla la pena capital para crímenes cometidos en tiempos de guerra.
El candidato presidencial argumenta que «la sanción más dura que se le puede aplicar a un delincuente, a un narcotraficante, a un violador, es la cadena perpetua», ya que los aísla de su entorno y de la sociedad de por vida. Según Kast, esto es «la muerte en vida» para estos individuos, sin llegar a la pena de muerte, la cual considera una «salida por arriba» que no se merecen.
Como ejemplo, Kast mencionó el modelo penitenciario implementado por el presidente Nayib Bukele en El Salvador, con el centro de máxima seguridad conocido como CECOT (Centro de Confinamiento del Terrorismo), donde los reclusos son mantenidos aislados de por vida. Kast prometió implementar un sistema similar en Chile si llegara a la presidencia.
Es importante destacar que los últimos condenados a muerte en Chile fueron los carabineros Jorge Sagredo Pizarro y Carlos Topp Collins, conocidos como los «psicópatas de Viña del Mar», quienes fueron fusilados en 1985. Desde entonces, la pena capital ha sido abolida en el país, salvo en el ámbito de la justicia militar.
En resumen, José Antonio Kast se opone a la pena de muerte y defiende la cadena perpetua como una alternativa más efectiva y humana, argumentando que aísla a los delincuentes de la sociedad de por vida, sin llegar a la pena de muerte que considera una «salida por arriba» que no se merecen.