En un remoto rincón de Jalisco, México, se ha descubierto un lugar que ha conmocionado a la nación: el Rancho Izaguirre, un centro de entrenamiento y exterminio vinculado al narcotráfico. Las imágenes y testimonios que han salido a la luz revelan una escena de terror sin precedentes.
Tras una llamada anónima, un colectivo de activistas de búsqueda de personas desaparecidas reportó el hallazgo de tres crematorios clandestinos en el predio. Dentro de este lugar apartado y rodeado de árboles, se encontraron cientos de pertenencias personales, restos óseos calcinados, casquillos de bala y cartas de despedida, evidenciando que este sitio operaba como un centro de reclutamiento y exterminio vinculado al Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), la organización criminal más poderosa de la región.
Un Infierno Oculto
Las autoridades han confirmado el descubrimiento de seis fosas comunes en el Rancho Izaguirre, donde se encontraron más de 500 indicios de restos humanos. Según los activistas, este lugar era conocido como «La escuelita del terror», un centro de entrenamiento criminal donde jóvenes, en su mayoría provenientes de la central de autobuses, eran reclutados y sometidos a un destino aterrador.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, calificó el hallazgo como «terrible» y abrió la puerta para que la Fiscalía General de la República se haga cargo del caso, con el objetivo de esclarecer la verdadera naturaleza del Rancho Izaguirre y dar con los responsables. Las imágenes obviamente son dolorosas, y pues hay que saber realmente qué pasó ahí antes de cualquier cosa. Entonces es importante esta investigación coordinada, aparte de que, obviamente, se deslinden las responsabilidades que se tienen que deslindar
, expresó la mandataria.
Un Pasado Oscuro Revelado
Las autoridades locales tenían conocimiento de la existencia del Rancho Izaguirre desde el año pasado. En septiembre de 2024, la Guardia Nacional realizó un operativo en el que se aseguró el predio, se detuvieron a 10 personas y se liberaron a dos secuestrados. Sin embargo, en aquel entonces no se lograron identificar restos humanos ni otros indicios que apuntaran a la magnitud de los horrores que se escondían en este lugar.
Ahora, con el descubrimiento de los crematorios clandestinos y las fosas comunes, la investigación se ha intensificado. Las autoridades han publicado una lista con más de 400 objetos encontrados, con la esperanza de que familiares de personas desaparecidas puedan identificar pertenencias de sus seres queridos. Además, se hace un llamado a posibles sobrevivientes del «centro de exterminio» para que ofrezcan sus testimonios y ayuden a esclarecer lo sucedido.
Un Recordatorio Aterrador de la Crueldad del Crimen Organizado
Las imágenes y detalles que han salido a la luz sobre el Rancho Izaguirre han congelado a la sociedad mexicana, que no puede imaginar los horrores que se llevaron a cabo en este lugar. La incertidumbre sobre cuánto tiempo estuvo en funcionamiento este centro de exterminio aumenta el terror y la indignación de la población.
Este descubrimiento se suma a la larga lista de atrocidades cometidas por el crimen organizado en México, y es un recordatorio aterrador de la crueldad y la impunidad que han prevalecido en algunas regiones del país. Ahora, las autoridades y la socicivil se enfrentan al desafío de esclarecer la verdad, identificar a las víctimas y llevar a los responsables ante la justicia.
