En un golpe contundente contra la delincuencia financiera, el sistema judicial chileno ha ordenado la expulsión de 23 miembros extranjeros de la banda criminal conocida como «La Empresa». Esta organización, de origen colombiano, se dedicaba al préstamo ilegal de dinero, principalmente a comerciantes, tanto en Chile como en el extranjero.
Según la investigación, los cobros de estos préstamos ilegales superaban con creces los límites legales, configurando así el delito de usura. Tras una ardua labor de la Policía de Investigaciones (PDI), la banda fue desmantelada en noviembre del año pasado, lo que resultó en la detención de 44 personas, entre ellas un chileno y 43 colombianos.
En una audiencia de procedimiento abreviado, el Juzgado de Garantía de Valparaíso condenó a 25 de los imputados, decretando la sustitución de las penas privativas de libertad por la medida de expulsión del país. Esto fue posible gracias a la coordinación entre el Ministerio del Interior, el Servicio de Migraciones y la PDI.
Según el fiscal Pablo Avendaño, «La Empresa» era una organización jerarquizada, con una jefatura en Colombia y otra en Chile, que contaba con un grupo de cobradores que ejercían presión sobre los deudores. Esta estructura criminal había estado operando desde al menos el año 2020.
La expulsión de estos 23 miembros extranjeros de «La Empresa» es un claro mensaje de que Chile no tolerará actividades delictivas de este tipo. Las autoridades han demostrado su determinación para desmantelar redes criminales que explotan a la población a través de préstamos ilegales y usurarios.
Este caso pone de manifiesto la importancia de la cooperación internacional y la coordinación entre las diferentes agencias del Estado para combatir eficazmente la delincuencia organizada que trasciende las fronteras. Chile ha dado un paso importante en la protección de sus ciudadanos y la preservación de la integridad del sistema financiero.
