Iván Moreira, senador de la UDI, ha salido en defensa del ministro del Interior, Álvaro Elizalde, rechazando enérgicamente las acusaciones de vínculos con el narcotráfico hechas por el líder del Partido Republicano, José Antonio Kast.
Según Moreira, las declaraciones de Kast, quien afirmó que la designación de Elizalde como ministro es «un retroceso gigantesco en la lucha contra el crimen organizado» debido a sus «relaciones políticas con personas eventualmente vinculadas al narcotráfico», son una «demostración más de la desesperación» del jefe de la «secta» republicana, quien se encuentra disminuido por el surgimiento de Johannes Kaiser.
«A mí me parece que lo que hace Republicanos y el jefe de la secta, Kast, es bastante miserable. Es instalar una política sucia, no de argumento. Y por muy que estemos lejos ideológicamente con el ministro Elizalde, nosotros no vamos a caer en estas actitudes que son verdaderamente reprochables», aseguró Moreira.
Rechazo a las Acusaciones
El senador compartió su reproche a través de X, donde recalcó lo «miserable» de la declaración del líder republicano. Moreira dejó en claro que, si bien es adversario político de Elizalde, no va a caer en «actitudes reprochables» como las acusaciones de Kast.
Esta confrontación se da en un contexto de tensión política, donde el Partido Republicano ha anunciado una ofensiva tras el nombramiento de Elizalde como ministro del Interior, acusándolo de tener vínculos con la «narcopolítica».
Defensa de la Trayectoria de Elizalde
Moreira ha salido en defensa de la trayectoria de Elizalde, señalando que, si bien pueden estar «lejos ideológicamente», no van a caer en las «actitudes miserables» del Partido Republicano y su líder, Kast. El senador de la UDI ha calificado estas acusaciones como una «política sucia» y una muestra de la «desesperación» de Kast ante el surgimiento de figuras como Johannes Kaiser.
La confrontación entre Moreira y Kast refleja la polarización política que se vive en el país, donde las acusaciones y ataques personales parecen ganar terreno en lugar de un debate constructivo y enfocado en propuestas concretas.