El mercado cambiario en Chile continúa experimentando una dinámica volátil, con el dólar estadounidense fluctuando cerca de la barrera psicológica de los $1.000 pesos chilenos. Diversos factores, tanto a nivel local como internacional, han influido en el comportamiento de esta divisa en las últimas semanas.
Repunte del Peso Chileno Impulsado por el Cobre
Uno de los principales elementos que ha favorecido al peso chileno en los últimos días es el reciente aumento en el precio del cobre, uno de los principales productos de exportación del país. Este movimiento alcista en el metal rojo ha fortalecido la posición del peso frente al dólar, lo que se ha reflejado en una ligera presión bajista sobre el tipo de cambio.
Según Ignacio Mieres, jefe de análisis de XTB Latam, las declaraciones positivas desde China, donde el regulador del mercado financiero anunció su compromiso de intensificar los esfuerzos para estabilizar el sistema financiero, han reafirmado la determinación del gobierno chino de mantener la estabilidad económica. Esto ha contribuido a la mejora de la percepción sobre el mercado de materias primas, beneficiando al peso chileno.
Medidas Comerciales de Estados Unidos y su Impacto
Por otro lado, la posible implementación de aumentos graduales en las tarifas comerciales por parte de la administración de Donald Trump, que oscilan entre el 2% y el 5% mensual, ha generado una reacción en el mercado que ha ejercido presión a la baja sobre el dólar.
Según el experto de XTB Latam, estas medidas, amparadas en la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional, buscan fortalecer la capacidad de negociación del país y evitar un incremento abrupto en la inflación. Sin embargo, la incertidumbre generada por estas acciones ha impactado en la cotización del dólar a nivel global.
Proyecciones a Corto Plazo y Estrategias de Estabilidad
De mantenerse las condiciones actuales que presionan a la baja al dólar, el tipo de cambio podría posicionarse en la zona de los $1.000 en el corto plazo. Esto representaría un alivio para la economía chilena, al reducir la presión inflacionaria y mejorar la competitividad de las exportaciones.
Sin embargo, es importante que las autoridades económicas mantengan una vigilancia constante y adopten estrategias para preservar la estabilidad del sistema financiero y cambiario. Esto incluye la implementación de políticas monetarias y fiscales adecuadas, así como la coordinación con los principales socios comerciales para evitar escaladas en las tensiones comerciales.
En resumen, el dólar continúa fluctuando cerca de los $1.000 pesos chilenos, influenciado por factores como el repunte del cobre y las medidas comerciales de Estados Unidos. Mientras que esto representa una oportunidad para la economía local, es crucial que se mantenga una gestión prudente y proactiva para garantizar la estabilidad a largo plazo.
