La conmoción y la incertidumbre se apoderan de las familias de cuatro niños que desaparecieron el pasado 8 de diciembre en Guayaquil, Ecuador. Después de semanas de búsqueda, esta semana se encontraron cuatro cuerpos calcinados en una zona rural de Taura, cerca del lugar donde los menores fueron vistos por última vez.
Los familiares de los niños, cuyas edades oscilan entre los 11 y 15 años, aguardan con angustia los resultados de los exámenes forenses que se están realizando en el Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil. Debido al avanzado estado de deterioro de los restos, las pruebas de identificación mediante huellas dactilares han sido descartadas, por lo que se recurrirá a análisis antropológicos y de ADN para determinar si se trata de los menores desaparecidos.
Una Desaparición Envuelta en Misterio
La desaparición de estos cuatro niños ha conmocionado a la sociedad ecuatoriana. Según testigos, los menores fueron detenidos por una patrulla militar después de salir a jugar fútbol en su barrio. Posteriormente, fueron trasladados a la zona de Taura, donde se encuentra una de las principales bases de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE).
Aunque las autoridades han señalado que los niños participaron en un supuesto robo, el fiscal a cargo del caso ha indicado que no existen elementos que respalden dicha acusación. Por el contrario, la falta de información clara y la aparición de los cuerpos calcinados han alimentado las sospechas de una posible desaparición forzada o incluso una ejecución extrajudicial.
Exámenes Forenses Clave para Esclarecer la Verdad
El director ejecutivo del Comité por la Defensa de los Derechos Humanos (CDH) de Guayaquil, Billy Navarrete, ha explicado que debido a las condiciones en las que se encontraron los cuerpos, la identificación mediante pruebas dactilares ha sido descartada. En su lugar, se realizarán exámenes antropológicos y de ADN, que podrían demorar entre 30 y 40 días en arrojar resultados concluyentes.
Si se confirma que los restos calcinados corresponden a los niños desaparecidos, el caso podría reconfigurarse de una desaparición forzada a una posible ejecución extrajudicial, dependiendo de los hallazgos forenses, según lo expresado por Abraham Aguirre, del área jurídica de la CDH.
Las familias de los menores y la sociedad ecuatoriana en general esperan con angustia y exigencia que se esclarezca la verdad sobre lo ocurrido con estos cuatro jóvenes, cuya desaparición ha conmocionado al país.
