La detención de Agustín Nahuel Gallo, un suboficial de la Gendarmería Nacional Argentina, se ha convertido en un nuevo foco de conflicto en la crítica relación diplomática entre Argentina y Venezuela. Gallo, oriundo de Catamarca, fue arrestado en un paso fronterizo entre Cúcuta, Colombia, y Táchira, Venezuela, por agentes de Contrainteligencia venezolanos, quienes lo acusan de ser un espía del gobierno argentino.
Según los familiares de Gallo, el arresto ocurrió el lunes pasado, pero no trascendió públicamente hasta este viernes por la tarde. El gendarme había partido desde Mendoza con la intención de pasar las fiestas junto a su esposa y su hijo de dos años, quienes residen en Venezuela desde hace nueve meses. Después, pensaba regresar al país para retomar su servicio.
Las autoridades venezolanas habrían encontrado en el teléfono celular de Gallo mensajes que cuestionan al gobierno venezolano, lo que habría motivado su detención. Yo le escribí a Nahuel para decirle, en los tiempos de las últimas elecciones: ‘Este país se está yendo a la mierda’, y que tenemos un gobierno horrible, una dictadura. Esos fueron los mensajes que le encontraron en su teléfono, lo que lo perjudicó, explicó su esposa.
Tensiones diplomáticas
Las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Argentina se han deteriorado en los últimos años debido a las acusaciones de fraude electoral en las últimas elecciones presidenciales. Desde agosto, la Embajada argentina en Venezuela está bajo la protección de Brasil, tras la expulsión de los diplomáticos argentinos.
El caso de Gallo ha reavivado estas tensiones bilaterales. La Cancillería argentina hizo un fuerte descargo y expresó su enérgico rechazo ante la detención arbitraria e injustificada del gendarme, asegurando que se trató de una detención sin motivo legítimo alguno y en abierta violación de los derechos fundamentales del suboficial.
Implicaciones y perspectivas
Este incidente ha profundizado aún más la crisis diplomática entre Argentina y Venezuela, dos países que ya mantenían relaciones tensas y deterioradas. La detención de Gallo, acusado de espionaje, ha generado una fuerte reacción del gobierno argentino, que ha prometido actuar con toda firmeza en todas las instancias y ante todos los organismos internacionales para exigir la inmediata liberación del suboficial detenido.
La situación plantea un escenario complejo, con implicaciones políticas y diplomáticas que podrían tener un impacto significativo en las relaciones bilaterales entre ambos países. Será crucial seguir de cerca los desarrollos y las acciones que tomen tanto Argentina como Venezuela para resolver esta nueva crisis diplomática.