El incidente ocurrió el pasado 1 de diciembre de 2024 durante el encuentro entre Fiorentina e Inter, cuando el jugador de 22 años, Edoardo Bove, se desvaneció de forma inesperada mientras se ataba los cordones.
Según los primeros reportes médicos filtrados a la prensa, Bove habría sufrido una crisis epiléptica que le provocó un paro cardíaco y el posterior desplome en el campo de juego. Inmediatamente, el cuerpo técnico del Inter y los jugadores de ambos equipos solicitaron la intervención urgente de los servicios médicos.
En el estadio Artemio Franchi, que ya sufrió la muerte de su capitán Davide Astori en 2018 por una patología cardiovascular, se quedó en absoluto silencio. El partido fue suspendido de inmediato mientras los médicos atendían al jugador.
Recuperación y pronóstico alentador
Tras la rápida atención médica en el campo, Edoardo Bove habría recuperado el conocimiento y estaría respirando de manera autónoma, con un ritmo cardíaco regular, según informan los medios locales. El jugador fue trasladado al Hospital Careggi de Florencia para continuar con su tratamiento y evaluación.
Esta noticia ha sido recibida con alivio por parte de sus compañeros de equipo, el cuerpo técnico de la Fiorentina y los aficionados, quienes se mantenían preocupados por la salud del joven promesa. El pronóstico parece ser alentador, aunque se requerirán más exámenes para determinar las causas exactas del incidente y descartar cualquier complicación.
Antecedentes y reacciones
El estadio Artemio Franchi de Florencia ya había sido escenario de una tragedia similar en 2018, cuando el capitán de la Fiorentina, Davide Astori, falleció por una patología cardiovascular. Este nuevo incidente ha generado una gran conmoción en el mundo del fútbol italiano y ha puesto de manifiesto la importancia de contar con protocolos médicos eficientes y personal capacitado para atender este tipo de emergencias.
Tanto el entrenador del Inter, Simone Inzaghi, como los jugadores de ambos equipos, reaccionaron rápidamente al desplome de Bove, solicitando de inmediato la intervención de los servicios médicos. Este gesto de solidaridad y preocupación por el bienestar del jugador ha sido ampliamente elogiado por los aficionados y la prensa deportiva.
A la espera de conocer más detalles sobre el estado de salud de Edoardo Bove y las causas de su desvanecimiento, la comunidad futbolística italiana se mantiene en oración y esperanza por la pronta recuperación del joven talento de la Fiorentina.