La Universidad de La Frontera (UFRO) en Temuco, región de La Araucanía, se encuentra sumida en una profunda crisis financiera que ha desencadenado una serie de acusaciones y denuncias que podrían derivar en una investigación penal por parte de la Fiscalía.
Según expertos, se reúnen las condiciones para que la Fiscalía inicie una investigación de oficio por los delitos de malversación de recursos públicos y cohecho. Esto se debe a las graves denuncias realizadas por funcionarios y estudiantes, quienes aseguran que se han utilizado fondos de la universidad para fines personales y recreativos, incluyendo adquisiciones insólitas como una camioneta blindada y un hotel.
Los problemas financieros de la UFRO han llevado a la notificación de 298 funcionarios bajo la modalidad de contrata, quienes no seguirán trabajando en la universidad el próximo año. Esta medida ha provocado el repudio de la comunidad estudiantil, especialmente de la facultad de medicina, quienes denuncian que dineros devueltos por compañías de seguros fueron reasignados sin justificación ni consentimiento del equipo directivo.
Abandono de Deberes y Toma de Instalaciones
Además de las denuncias de malversación de fondos, los expertos también señalan que ha existido un notable abandono de deberes por parte de las autoridades universitarias, encabezadas por el rector Eduardo Hebel, quien se encuentra fuera de sus labores por licencia médica.
En medio de esta crisis, diferentes instalaciones del Campus Andrés Bello se encuentran tomadas por estudiantes, quienes exigen la renuncia de los responsables de esta situación. Paralelamente, el Consejo de Presidentes ha revalidado el paro estudiantil por tercera semana consecutiva.
Posible Culminación del Año Académico de Forma Telemática
Ante la incertidumbre sobre el futuro de la UFRO, los estudiantes han planteado la posibilidad de culminar el año académico con clases y evaluaciones telemáticas, buscando una solución que les permita continuar con su formación en medio de esta compleja coyuntura.
Esta crisis financiera en la UFRO ha desatado un escándalo que podría derivar en una investigación penal por parte de la Fiscalía, lo que evidencia la urgente necesidad de transparencia y rendición de cuentas en la administración de los recursos públicos de la universidad.
