China ha rechazado enérgicamente las recientes acusaciones de Paraguay y Estados Unidos sobre un supuesto caso de ciberespionaje contra los sistemas del Gobierno paraguayo. La Embajada china en Panamá calificó estas acusaciones como una calumnia y afirmó que Estados Unidos es el responsable de lanzar ciberataques y atribuirlos a otros países.
Según la versión china, Washington habría utilizado tecnologías avanzadas para insertar cadenas de caracteres en otros idiomas, como el chino, con el fin de engañar el análisis de atribución de trazabilidad y culpar a terceros países. Además, la Embajada acusó a Estados Unidos de usar cables ópticos submarinos para realizar escucha y robo de secretos masivos.
Por su parte, el Gobierno de Paraguay reconoció que se enfrenta a desafíos en ciberseguridad y reafirmó su compromiso de trabajar de manera estrecha con socios internacionales, como Estados Unidos, para enfrentar los desafíos globales del ciberespacio y proteger sus activos digitales.
Esta disputa se produce en un contexto de tensiones geopolíticas entre China y Estados Unidos, donde ambos países se acusan mutuamente de actividades de espionaje cibernético. Mientras Pekín niega rotundamente las acusaciones, Washington insiste en que China representa una amenaza cibernética que debe ser abordada.