Mario Aliaga, conocido cariñosamente como «Lile», era un hombre lleno de planes y sueños por vivir. Desafortunadamente, su vida se vio truncada por un agresivo cáncer que lo aquejaba desde hace menos de un año. A pesar de los esfuerzos por vencer la enfermedad, Lile falleció a los 75 años, dejando un profundo vacío en el corazón de su hija, la comunicadora Paloma Aliaga, y su familia.
La noticia del fallecimiento de Mario Aliaga sacudió a la familia Aliaga, quienes habían luchado incansablemente por mantenerlo con vida. Paloma recuerda con pesar que «en enero le descubrieron un tumor en el pulmón en grado 3A y se hizo todo el tratamiento en radio y quimio. No quería morir, quería vivir». Desafortunadamente, a pesar de los esfuerzos, la salud de Lile se fue deteriorando en los últimos meses, y «hasta el último día estuvo consciente, Así que fue doloroso para todos, que sabíamos que se estaba apagando como una velita».
Una Familia Unida en la Adversidad
Aunque la partida de Mario Aliaga fue una tragedia familiar, Paloma Aliaga expresa su gratitud por haber podido disfrutar de su padre en los últimos tiempos. «Afortunadamente lo pudimos disfrutar mucho, era ya casi un hijo para mí, lo llevábamos a todas partes, viajamos mucho con él y era cómplice de mis hijas», recuerda con cariño.
La nieta de Lile, Eloísa Valenzuela, también expresó su profundo dolor por la pérdida de su abuelo, escribiendo en sus redes sociales: «No sabes cuánta falta me vas a hacer ‘Lile’. Te amo para siempre»
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Una Lucha Incansable Contra el Cáncer
Según lo revelado, Mario Aliaga había logrado vencer al cáncer en ocasiones anteriores, pero su salud finalmente se vio afectada por complicaciones relacionadas con la enfermedad. «Él tenía planes de vida, pero en el fondo todos sabíamos de que no había vuelta atrás», expresó Paloma con pesar.
La familia Aliaga-Valenzuela enfrentó con valentía y unión esta dura batalla, acompañando a Lile hasta el final y atesorando los momentos compartidos. Aunque su partida ha dejado un vacío, el legado de fortaleza, amor y vida que Mario Aliaga dejó en sus seres queridos perdurará por siempre.
