En un esfuerzo por hacer justicia, los detectives de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales (Brisex) de Chillán, en la región de Ñuble, han logrado la detención de un hombre de 32 años que se encontraba prófugo tras ser condenado por el delito de abuso sexual.
Según el jefe de la Brisex Chillán, el subprefecto Iván Velásquez Medina, el detenido había recibido una pena sustitutiva por el delito cometido, pero en lugar de cumplirla, se mantuvo escondido de la justicia. Esto llevó al Juzgado de Garantía de la ciudad a emitir una orden de detención en su contra.
Para dar con el paradero del prófugo, los detectives realizaron una exhaustiva investigación, combinando inteligencia policial, análisis criminal, puntos fijos, trazabilidad de información y empadronamiento en diferentes sectores. Según Velásquez Medina, el condenado intentó evadir la justicia cambiando constantemente de domicilio y lugar de trabajo, pero finalmente fue localizado y puesto a disposición del tribunal correspondiente.
Los hechos investigados se remontan a una causa anterior, en la que la misma Brigada Brisex determinó que el condenado había abusado sexualmente de su propia hija cuando ella tenía 13 años. Este caso pone de manifiesto la importancia del trabajo incansable de las fuerzas de seguridad para hacer cumplir la ley y proteger a las víctimas de delitos tan graves.
La labor de los detectives fue exitosa, por cuanto fue hallado, y puesto a disposición del tribunal respectivo, afirmó el subprefecto Velásquez Medina, destacando el esfuerzo y la determinación del equipo de la Brisex para dar con el paradero del prófugo y llevarlo ante la justicia.