Jueza Ángela Vivanco Enfrenta Batalla Legal: ¿Acudirá a la Corte Interamericana de Derechos Humanos?
La jueza Ángela Vivanco, suspendida ministra de la Corte Suprema, se encuentra en el centro de una investigación por supuestas conversaciones con el abogado Luis Hermosilla, el principal imputado en el conocido caso Audio. Esta situación ha desencadenado un cuaderno de remoción en su contra por parte del máximo tribunal, así como dos acusaciones constitucionales en la Cámara de Diputadas y Diputados.
La Defensa de Vivanco Cuestiona el Proceso
Según la defensa de la magistrada, en la investigación de la Suprema no habría un trato justo, mientras que en los libelos acusatorios existirían problemas de forma y fondo. El abogado Cristóbal Osorio, en representación de Vivanco, ha expuesto ante el Congreso que plantearon las defensas de fondo, trajeron una serie de documentos para poder exponerlas a la comisión y que llegue la certeza de la improcedencia de la acusación constitucional.
La Improcedencia de las Acusaciones Constitucionales
La defensa de Vivanco ha argumentado que las acusaciones constitucionales presentadas son improcedentes e inconstitucionales, ya que el artículo 52, número 2, que regula este tipo de acusaciones, indica que solo pueden ser firmadas por 20 diputados, y en este caso suman 21 diputados. Además, han señalado que, según el reglamento del Congreso, un parlamentario no puede emitir opiniones previas sobre el caso, lo que pondría en duda la imparcialidad de algunos diputados.
La Opción de Acudir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos
Ante esta situación, la defensa de Ángela Vivanco no ha descartado la posibilidad de acudir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Según el abogado Osorio, esta sería una opción a evaluar por la ministra, ya que en la CIDH se analizan los derechos fundamentales y existe una jurisprudencia asentada respecto al debido proceso en juicios políticos.
Conclusión
La batalla legal de la jueza Ángela Vivanco se perfila como un caso complejo y desafiante, donde su defensa cuestiona la imparcialidad del proceso y la procedencia de las acusaciones constitucionales en su contra. La posibilidad de acudir a la Corte Interamericana de Derechos Humanos se presenta como una alternativa que la defensa de Vivanco no descarta, en su esfuerzo por salvaguardar los derechos fundamentales y el debido proceso de su representada.