Violencia de Género en Kenia: La Trágica Historia de la Atleta Olímpica Rebecca Cheptegei
La muerte de la atleta olímpica Rebecca Cheptegei, quien fue quemada viva con gasolina por su expareja en Kenia, ha conmocionado al mundo y puesto en evidencia la dramática situación que enfrentan las mujeres en este país africano. Lamentablemente, este no es un caso aislado, sino que se suma a una larga lista de feminicidios que han sacudido a la nación en los últimos años.
Una Tragedia Anunciada
Según los familiares de Cheptegei, la Policía no actuó a tiempo a pesar de que habían denunciado en repetidas ocasiones las amenazas y el acoso de la expareja de la deportista. Las agencias gubernamentales nos han fallado porque informamos con suficiente antelación sobre su seguridad, ya que este hombre solía seguirla incluso hasta Uganda, pero no actuaron con rapidez, declaró el padre de la víctima, Joseph Cheptegei.
La Violencia de Género, un Problema Endémico en Kenia
Lamentablemente, la violencia de género es un fenómeno generalizado en Kenia, donde una mujer muere a manos de su pareja o de un familiar cercano cada dos días, según datos del Centro Nacional de Investigación Criminal (NCRC). Además, el 28% de las mujeres entre 15 y 49 años que han tenido alguna relación sentimental con un hombre han sufrido violencia física, sexual o emocional.
A pesar de los esfuerzos del gobierno y de las organizaciones civiles por combatir este flagelo, la violencia de género sigue siendo endémica en Kenia, afectando incluso a las mujeres de élite, como lo demuestra el caso de las maratonistas Agnes Tirop y Damaris Mutua, quienes también fueron asesinadas brutalmente por sus parejas en 2021 y 2022, respectivamente.
Leyes Discriminatorias y Falta de Protección
Según un informe de la organización Equality Now, el código penal de Kenia discrimina a las mujeres y las niñas en el matrimonio, el divorcio o algunos derechos como la custodia de menores de edad. Esto las hace más dependientes y vulnerables, incluso restringiendo sus oportunidades económicas y reduciendo su poder de toma de decisiones.
Además, la Comisión de la Verdad, la Justicia y la Reconciliación de Kenia (TJRC) concluyó en 2008 que la violencia sexual y de género, incluidas las violaciones en grupo, las agresiones y torturas sexuales, la esclavitud sexual y la mutilación genital forzada, ha sido durante mucho tiempo un problema en el país, especialmente en tiempos de conflicto.
Conclusión
La trágica muerte de Rebecca Cheptegei es un claro recordatorio de la urgente necesidad de combatir la violencia de género en Kenia. Mientras las leyes sigan discriminando a las mujeres y la Policía no actúe con la debida diligencia, esta problemática seguirá cobrando vidas inocentes. Es momento de que el gobierno y la sociedad civil tomen medidas contundentes para erradicar esta lacra y garantizar la seguridad y los derechos de las mujeres y las niñas en este país.
