Escándalo en el Sistema de Salud: Parlamentarios Exigen Mayor Fiscalización Ante Compra de Licencias Médicas Falsas
La compra de licencias médicas falsas ha desatado una crisis en el sistema de salud chileno, y los parlamentarios han alzado su voz para exigir una respuesta contundente del Gobierno. Esta práctica fraudulenta, que ha sido revelada por el Servicio de Salud Metropolitano Norte, ha puesto en evidencia la urgente necesidad de reforzar los controles y la fiscalización en la emisión de estos documentos.
Reacciones desde la Comisión de Salud
Desde la Comisión de Salud, los parlamentarios han expresado su indignación y han hecho un llamado a la acción. El diputado RN, Andrés Celis, calificó la situación como inaceptable y enfatizó la necesidad de fortalecer la fiscalización en la emisión de licencias médicas. Por su parte, el parlamentario demócrata cristiano, Héctor Barría, criticó las tramitaciones que, en muchos casos, afectan a los pacientes, quienes luego no reciben sus devoluciones.
Respaldo del Gobierno y Llamado a la Responsabilidad
La subsecretaria de Salud Pública, Andrea Albagli, dejó en claro que la investigación sobre la compra de licencias médicas falsas sigue avanzando. Sin embargo, advirtió que no se debe atribuir la responsabilidad a todos los profesionales del sector. En la misma línea, la diputada PPD y presidenta de la Comisión de Salud, Helia Molina, compartió las palabras del Gobierno y apuntó en contra de los involucrados en la polémica.
Urgencia de Reforzar los Controles
Según expertos, este escándalo pone en evidencia la urgencia en reforzar los controles sobre la emisión de licencias médicas en el sector público. La revelación de que al menos 14 profesionales comercializaron 169 licencias otorgadas, que acumuladas superan los 7 años de ausentismo, es una muestra clara de la magnitud del problema y de la necesidad de implementar medidas efectivas para evitar que estas prácticas se repitan.
Conclusión
El escándalo de las licencias médicas falsas ha sacudido los cimientos del sistema de salud chileno, y los parlamentarios han respondido con una clara demanda de mayor fiscalización y responsabilidad. Es imperativo que el Gobierno tome medidas contundentes para abordar esta crisis y restaurar la confianza de los ciudadanos en el sector de la salud. Solo así podremos asegurar que los pacientes reciban la atención y el cuidado que merecen, sin verse afectados por prácticas fraudulentas que ponen en riesgo la integridad del sistema.