Gobierno Chileno Desafía a Enel: Ultimátum y Posible Participación Estatal en Distribución Eléctrica
En un giro inesperado, el Gobierno de Chile ha tomado medidas drásticas contra la empresa eléctrica Enel, dando un nuevo ultimátum para que restablezca el servicio a todos los clientes en 72 horas. De lo contrario, el proceso para caducar la concesión de Enel pasará a una siguiente fase.
Esto se produce después de que la empresa cumpliera con la segunda meta impuesta por el Ejecutivo de restituir el servicio a 14 mil clientes en 48 horas. Sin embargo, aún hay más de 30 mil hogares sin luz en el país.
Ultimátum y Posible Participación Estatal
Según el ministro de Energía, Diego Pardow, si Enel cumple con esta nueva exigencia, el proceso de caducidad de su concesión se mantendría en la Etapa de Requerimiento, quedando en pausa. Pero si no lo consigue, la medida seguirá adelante.
Además, el ministro Pardow aseguró que es una discusión que hay que tener con tiempo sobre la posibilidad de que el Estado tenga participación en la distribución eléctrica. Esto abre la puerta a una mayor intervención gubernamental en este sector estratégico.
Antecedentes y Proceso de Caducidad
Cabe recordar que el proceso de caducidad de la concesión de Enel se encuentra actualmente en la Etapa de Requerimiento (fase 1). En caso de avanzar, llegaría a la Etapa Adversarial (fase 2), mediante la cual se pondría término al contrato de la empresa estatal italiana.
Este ultimátum y la posibilidad de una mayor participación estatal en la distribución eléctrica son una clara señal del Gobierno de Chile de que no tolerará más fallas en el servicio eléctrico y está dispuesto a tomar medidas drásticas para garantizar el suministro a la población.
Conclusión
El Gobierno de Chile ha dado un ultimátum contundente a Enel, exigiendo que restablezca el servicio eléctrico a todos los clientes en 72 horas o enfrentará el proceso de caducidad de su concesión. Además, se abre la posibilidad de que el Estado tenga una participación más activa en la distribución eléctrica, lo que podría marcar un cambio significativo en el modelo de este sector estratégico.
Esta decisión del Gobierno demuestra su determinación por garantizar un suministro eléctrico confiable y eficiente para todos los chilenos, sin importar las consecuencias para las empresas privadas. Es un claro mensaje de que el bienestar de la población es la prioridad.
