Escuchar a los Niños: La Clave para un Futuro Brillante

En un mundo en constante cambio, el Presidente Boric ha emitido un poderoso mensaje por el Día de la Niñez, recalcando la importancia de escuchar y aprender de las opiniones y experiencias de niñas y niños. En un video compartido a través de X, el mandatario reflexiona sobre su propia infancia, cuando sentía que los adultos no escuchaban a los niños en general.

Cuando yo era niño e iba al colegio, sentía una frustración bien grande, porque sentía que los adultos no escuchaban, no a mí, sino a los niños en general, expresó el Presidente Boric.

Abrirse a Aprender de los Más Jóvenes

El Presidente enfatiza que el cambio en la cultura y el que las personas adultas entendamos que la opinión de los niños es importante, y que nos abramos a aprender de sus experiencias y de su visión del mundo, es fundamental en un mundo que está cambiando tan rápidamente.

Esta perspectiva refleja una comprensión profunda de la importancia de valorar y aprovechar las perspectivas únicas que los niños y jóvenes pueden aportar. Lejos de verlos como simples receptores de conocimiento, el Presidente Boric reconoce que los niños tienen mucho que enseñarnos sobre cómo adaptarnos a los desafíos del presente y construir un futuro más brillante.

Trabajando por los Niños y Jóvenes de Chile

En su mensaje, el Presidente Boric también agradeció a NTVChile por sus preguntas y regalos significativos, reafirmando su compromiso de seguir trabajando por los niños, niñas y adolescentes de Chile.

Este llamado a escuchar y aprender de los más jóvenes es un mensaje poderoso que trasciende las fronteras de Chile. Es una invitación a que todos los adultos, líderes y miembros de la sociedad, nos abramos a las perspectivas y experiencias de los niños, pues en ellos reside la clave para construir un mundo más justo, inclusivo y adaptado a las necesidades de la próxima generación.

Conclusión

El mensaje del Presidente Boric por el Día de la Niñez es un llamado a la acción, a que escuchemos y aprendamos de los niños y jóvenes, pues en sus voces y experiencias se encuentra la clave para un futuro más brillante. Al abrirnos a esta sabiduría, podremos construir una sociedad más justa, inclusiva y adaptada a las necesidades de quienes la heredarán.