Escándalo en el Deporte: Destapan Red de Protección para Delincuentes

En un impactante desarrollo, el periodista Felipe Bianchi ha destapado una red de protección que opera al interior de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) para encubrir a personas que han cometido delitos graves relacionados con el deporte en Chile.

Bianchi reveló estos hallazgos durante la quinta sesión de la Comisión Especial Investigadora por Agresiones Sexuales en el Deporte de la Cámara de Diputados, en el marco de la investigación sobre la denuncia de violación grupal en la Casa Naranja de Cobreloa en 2021, así como las acusaciones por abusos sexuales en contra del exentrenador de hockey patín, Eduardo Flores.

Una Cadena Vergonzosa de Hechos

Según Bianchi, estamos ante una cadena vergonzosa de hechos que mezclan delitos graves y una evidente red de protección desplegada desde el deporte para entorpecer la investigación en estos casos espantosos.

El periodista enfatizó que la agredida cumplió todos los pasos que el Estado de Chile pone como para hacer una denuncia; la PDI recomendó desestimar y archivar el caso; el entonces presidente del club, Fernando Ramírez, resolvió no investigar pese a que el delito gravísimo había sido ocurrido en sus instalaciones y cometido por sus representados; y la ANFP decidió no hacer nada porque dijo que la víctima no pertenece a la actividad deportiva.

Incumplimiento Flagrante de la Ley

Bianchi señaló que este accionar constituye un incumplimiento flagrante de la ley del Decreto 22 de las organizaciones deportivas, que obliga a tomar medidas contra quienes clara y desvergonzadamente han entorpecido la investigación pese a estar impedidos de hacer justamente lo contrario.

El periodista advirtió que el peligro de no hacer nada es ratificar la idea de que el fútbol profesional tiene leyes propias y hace lo que quiere, como ha sucedido varias veces ya en otros ámbitos. Basta con mencionar la relación con las casas de apuesta o la inacción por años ante las exigencias de frenar los actos violentos en sus casas que son los estadios.

Llamado a la Acción

Bianchi concluyó afirmando que aquí está comprobadísima una red de protección desde el deporte a quienes cometieron el delito y al club que los ampara, y un entorpecimiento a la investigación que es del todo evidente. Advirtió que volver a no hacer nada al respecto, como ha pasado muchas veces en etapas anteriores, sería volver a decirle a la sociedad chilena que el fútbol tiene reglas propias y se manda según quiere y como quiere.

Este escándalo ha sacudido los cimientos de la ANFP y ha puesto en evidencia la urgente necesidad de reformas y mayor transparencia en el deporte chileno, con el fin de erradicar estas prácticas inaceptables y garantizar la integridad y el bienestar de todos los involucrados.