Iglesias Protestantes Excluidas de la Comisión para la Paz: Un Llamado a la Inclusión
En un momento crucial para la búsqueda de la paz y el entendimiento en La Araucanía, las iglesias protestantes de Chile han denunciado su exclusión de la Comisión Presidencial para la Paz y el Entendimiento. Según los líderes evangélicos, esta falta de representación pone en riesgo el éxito de la iniciativa y amenaza con condenarla al fracaso.
La Voz de los Excluidos
Emiliano Soto, obispo evangélico y representante de las iglesias protestantes de Chile, expresó su malestar por la situación: Los evangélicos, a pesar de tener el 38%-40% acá en la región, no fuimos convocados, fuimos más bien excluidos. Tanto la iglesia católica como del mundo evangélico. Esta exclusión, según Soto, es un grave error que puede comprometer los esfuerzos por lograr una solución duradera al conflicto.
La Importancia de la Participación Evangélica
Las iglesias protestantes han desempeñado un papel fundamental en la comunidad mapuche, brindando apoyo espiritual y social a lo largo de los años. Su exclusión de la Comisión Presidencial para la Paz y el Entendimiento representa una oportunidad perdida para aprovechar su experiencia y conexión con el pueblo indígena.
Hacia una Comisión Verdaderamente Inclusiva
La denuncia de las iglesias protestantes pone de manifiesto la necesidad de que la Comisión Presidencial para la Paz y el Entendimiento sea una instancia verdaderamente representativa de todos los actores involucrados en el conflicto de La Araucanía. Solo a través de la inclusión y el diálogo abierto podrán encontrarse soluciones duraderas que satisfagan las demandas de todas las partes.
Conclusión: Un Llamado a la Inclusión
La exclusión de las iglesias protestantes de la Comisión Presidencial para la Paz y el Entendimiento es un error que debe ser subsanado. Solo a través de la participación de todos los actores clave, incluyendo a las comunidades evangélicas, se podrá lograr una resolución justa y duradera del conflicto en La Araucanía. Es hora de que el Gobierno escuche la voz de los excluidos y construya una comisión verdaderamente inclusiva.