Síndrome Boca-Mano-Pie: Síntomas y Prevención para Proteger a Tus Hijos

Como padres, una de nuestras mayores preocupaciones es la salud de nuestros hijos. Una de las infecciones que afecta exclusivamente a niños y niñas es el síndrome boca-mano-pie, una condición que puede producir sarpullido o ampollas en las partes del cuerpo que dan origen a su nombre. Pero, ¿sabes cómo reconocer los síntomas y prevenir el contagio en tu familia? En este artículo, te lo explicamos todo.

¿Qué es el Síndrome Boca-Mano-Pie?

El síndrome boca-mano-pie es una infección causada por el virus coxsackie, que forma parte de la familia de los enterovirus (que también incluye a la hepatitis A y el virus del polio). Este virus vive en el aparato digestivo y suele afectar principalmente a lactantes y niños menores de 5 años, quienes desarrollan los síntomas a partir del contagio.

Síntomas Característicos del Síndrome Boca-Mano-Pie

Uno de los síntomas más comunes de esta infección es la aparición de sarpullido o ampollas en la boca, como en la lengua, encías y cara interna de las mejillas; así como en las palmas de las manos, plantas de los pies y glúteos. Además, los niños pueden presentar fiebre, dolor de garganta, náuseas, irritabilidad y pérdida del apetito.

Cómo se Contagia el Síndrome Boca-Mano-Pie

El síndrome boca-mano-pie se transmite a través de gotitas de saliva que contienen partículas del virus, cuando una persona estornuda o tose. También puede contagiarse por contacto directo con una persona infectada, como besarse, abrazarse o compartir tazas, vasos o cubiertos.

Prevención del Síndrome Boca-Mano-Pie

Para prevenir el contagio del síndrome boca-mano-pie, es fundamental mantener una buena higiene y lavarse las manos constantemente. Algunos consejos clave son:

• Lavarse las manos después de ir al baño, cambiar un pañal, limpiarse la nariz, toser o estornudar, y antes de preparar o comer alimentos.
• Enseñar a los niños buenos hábitos de higiene, explicándoles por qué no deben ponerse las manos o dedos en la boca.
• Desinfectar las áreas comunes, ya que los virus pueden sobrevivir en las superficies por días.
• Evitar el contacto cercano si alguien está contagiado, manteniéndolos alejados de quienes no tienen síntomas.

Tratamiento del Síndrome Boca-Mano-Pie

Afortunadamente, el síndrome boca-mano-pie no tiene un tratamiento específico, ya que las molestias suelen desaparecer por sí solas en unos días. Sin embargo, se recomienda mantener la hidratación, dar alimentos en base a papillas y administrar analgésicos como paracetamol o ibuprofeno para aliviar el malestar.

Conclusión

El síndrome boca-mano-pie es una infección común en niños pequeños, pero con los cuidados adecuados y una buena higiene, puedes prevenir el contagio y mantener a tu familia a salvo. Recuerda estar atento a los síntomas y actuar rápidamente si sospechas que tu hijo podría estar enfermo. ¡Juntos, podemos proteger la salud de nuestros pequeños!