Devastación en Gaza: Más de 36.600 palestinos muertos en la ofensiva de Israel
La Franja de Gaza se ha convertido en un escenario de devastación y sufrimiento, donde la ofensiva militar de Israel ha cobrado la vida de más de 36.600 palestinos, según los últimos informes del Ministerio de Salud gazatí. Esta tragedia humanitaria ha dejado un rastro de dolor y desesperación que sacude al mundo.
El Ministerio de Sanidad de Gaza, vinculado al grupo Hamás, ha elevado la cifra provisional de muertes a 36.654, después de confirmar otras 68 fallecidos en las últimas 24 horas. Además, más de 83.300 personas han resultado heridas en los ataques.
Una crisis sin precedentes
El Gobierno de Gaza también ha informado de que unos 25.000 palestinos necesitan salir de la Franja para recibir tratamiento médico, ya que apenas 4.900 pudieron cruzar a Egipto cuando el paso fronterizo de Rafá aún estaba abierto. Lamentablemente, el control de dicho paso por parte de Israel, que amplió en mayo su ofensiva a Rafá, ha provocado que ningún herido o enfermo haya podido salir de la Franja, lo que según las autoridades gazatíes puede poner en riesgo la vida de miles
de personas.
Un llamado a la acción internacional
Esta crisis humanitaria sin precedentes exige una respuesta urgente de la comunidad internacional. Los palestinos de Gaza se enfrentan a una devastación sin precedentes, con miles de vidas perdidas y un futuro incierto. Es momento de que la solidaridad y la acción global se unan para poner fin a este conflicto y brindar la asistencia necesaria a la población afectada.
Conclusión
Los números son abrumadores y reflejan la magnitud de la tragedia que se vive en Gaza. Más de 36.600 palestinos han perdido la vida, y miles más han resultado heridos o necesitan atención médica urgente. Esta crisis humanitaria exige una respuesta internacional inmediata y efectiva, para poner fin al sufrimiento de la población y brindar la asistencia necesaria. Es momento de que la conciencia global se active y se tomen las medidas necesarias para proteger a los civiles y garantizar una solución justa y duradera.