Escándalo en el Hospital: Técnico de Enfermería Abusa Sexualmente de Colega Embarazada

En un caso que ha conmocionado a la comunidad médica, un Técnico en Enfermería de Nivel Superior (TENS) ha sido desvinculado de su cargo después de ser sentenciado a 4 años de presidio con libertad vigilada por abuso sexual en contra de una enfermera embarazada que trabajaba en el mismo hospital.

El Complejo Asistencial de Padre las Casas confirmó la desvinculación del funcionario, identificado como Edgar Aravena, de 39 años, quien a partir del próximo 27 de mayo dejará de cumplir sus labores en el centro de salud.

La Denuncia y el Proceso Judicial

Según la información recabada, la propia víctima, quien también es funcionaria de la salud en dicho recinto, denunció que al regresar a su trabajo debió compartir el mismo espacio con su agresor, ya que este no había sido apartado de sus funciones o removido a otro centro.

Diversos gremios de funcionarios de la salud de la región, la Defensoría Feminista y otras organizaciones prestaron su apoyo a la víctima y solicitaron directamente a quien lidera el recinto de salud la desvinculación del funcionario, acusando indolencia y de revictimización.

El Apoyo a la Víctima

Desde la agrupación Salud Mental Digna indicaron que prestaron apoyo a la funcionaria para avanzar en el proceso, que estuvo marcado por una larga investigación y el resultado de una sentencia que no fue lo que esperaban.

Además, se informó que el Hospital Dr. Hernán Henríquez Aravena de Temuco instruyó un sumario que se encuentra en su etapa resolutiva, lo que podría implicar la aplicación de una medida disciplinaria y un eventual registro del hecho en la hoja de vida del funcionario.

Conclusión

Este caso pone de manifiesto la urgente necesidad de implementar medidas efectivas para prevenir y sancionar los abusos de poder y la violencia sexual en el ámbito de la salud, donde se supone que los profesionales deben brindar cuidado y protección a los pacientes. Es imperativo que las instituciones médicas tomen acciones contundentes para garantizar la seguridad y el bienestar de todo su personal, especialmente de las mujeres y las personas vulnerables.

Solo así podremos avanzar hacia un sistema de salud más justo, equitativo y respetuoso de los derechos humanos.