Descubre la Cultura Woke: Cómo se Manifiesta en Chile y Desafía el Orden Establecido

La cultura woke surge en los Estados Unidos en la década pasada, inspirada en los movimientos Black Lives Matter, MeToo y de otros grupos identitarios. Esta cultura fue rápidamente adoptada por la primera generación de nativos digitales, nacidos a mediados de los años noventa, conocida como la generación Z en muchos países del mundo, como Francia, España, Hong Kong y Chile.

Estos jóvenes, que en su adolescencia accedieron a las redes sociales y tuvieron una niñez muy protegida y acomodada, se volvieron muy belicosos y contestatarios, proclamándose a sí mismos como guerreros de la justicia social. Se pueden identificar dos aspectos clave en esta cultura que determinan su conducta: la censura y la violencia.

La Censura: Dueños de la Verdad y Cancelación de Disidentes

La censura se manifiesta en el sentimiento de ser dueños de la verdad, donde quienes no piensan como ellos son cancelados. Esta mordaza a la libre expresión se ha visto en cientos de revocaciones de invitaciones a relatores en las principales universidades de Estados Unidos, que no compartían sus ideas. Si las autoridades no suspendían las invitaciones, bloqueaban la entrada a los salones de conferencia y hacían ruido para que no pudieran hablar.

En Chile, esta intolerancia hacia la discrepancia se ha manifestado en múltiples casos, como el del exdirector del Instituto Nacional de Derechos Humanos, que fue funado cuando dio una charla en la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile.

La Violencia: Protestas, Vandalismo y Destrucción de Monumentos

Por otro lado, la violencia se traduce en protestas violentas, en muchos casos con encapuchados. Igualmente, vandalizan y destruyen monumentos nacionales venerados por la gran mayoría de ciudadanos, como los dedicados a Cristóbal Colón, Abraham Lincoln, Jefferson y otros en Estados Unidos. En Chile, ocurrió algo similar con Cristóbal Colón, Pedro de Valdivia y el más conocido de todos, el General Baquedano, en la Plaza Italia.

Características de la Generación Z: Visuales, Aprendizaje por Ensayo y Error, y Narcisismo Psiquiátrico

La generación Z se caracteriza por ser eminentemente visual, a diferencia de las generaciones anteriores que eran fundamentalmente verbales. Así, la comunicación icónica es la que prevalece, y un claro ejemplo de esto es el perro Matapacos en Chile, que se convirtió en icono de la primera línea y del octubrismo.

Además, esta generación se caracteriza por un proceso de aprendizaje en base a ensayo y error, a diferencia de las generaciones anteriores que eran de tipo cognitivo. Esto ha significado que esta nueva generación es la primera en la historia, desde donde se tiene registro, que tiene un coeficiente intelectual inferior al de sus padres (A reversal of the Flynn effect. Pietsching, Jakob et al, 2015).

También se observa un sentido de superioridad moral al negar vehemente la verdad objetiva, lo que puede considerarse como un narcisismo psiquiátrico de esta generación.

La Lucha por la Igualdad y el Futuro Incierto de la Cultura Woke

Los woke luchan por la igualdad como su última meta, como decía un ministro de Educación, hay que quitarle los patines a los alumnos de colegios privados. La izquierda radical, ante la ausencia de un proletariado oprimido, ha tomado como su propia causa el concepto de igualdad woke que lucha por los grupos marginalizados como el LGBTQ+ entre otros, y así, aunque algunos lo nieguen, la izquierda chilena es woke.

El futuro de esta cultura se ve incierto, ya que, como decía el presidente Obama, no se puede llegar lejos tirando piedras. Tampoco se puede ir contra la naturaleza humana que hizo a cada persona diferente e irrepetible.

Conclusión

La cultura woke ha tenido un impacto significativo en Chile, con su énfasis en la censura, la violencia y un sentido de superioridad moral. Esta generación Z, caracterizada por su enfoque visual y su aprendizaje por ensayo y error, ha desafiado los valores tradicionales y generado debates en torno a la igualdad y la justicia social. Sin embargo, su futuro se ve incierto, ya que ir en contra de la naturaleza humana y la libre expresión puede ser un camino difícil de recorrer.