El Genocidio Olvidado: La Devastadora Persecución de los Cristianos en Nigeria

En la noche del 14 de abril de 2014, en Bioko, en el norte de Nigeria, el grupo terrorista Boko Haram irrumpió en un colegio femenino en Chibok, Borno, con el fin de secuestrar y esclavizar a 279 alumnas, de las que 219 permanecían en paradero desconocido dos años después. Boko Haram, a veces traducido como "la educación occidental es pecado", en particular cuando son las niñas las que reciben este tipo de formación, es un grupo terrorista islamista que percibe la "occidentalización" de Nigeria como la principal fuente de "corrupción" del país.

Desde 2010, los blancos de Boko Haram han sido los centros educativos, donde han llegado a matar a centenares de escolares, en su mayoría cristianos. Desde que las alumnas de Chibok fueron secuestradas, una multitud de escuelas han sido objeto de ataques, y hay niñas que han sido secuestradas, violadas, asesinadas u obligadas a contraer "matrimonio". Este acto bestial casi no tuvo repercusión en las agencias occidentales, si no hubiese sido por la candidata presidencial Hillary Clinton, que en 2016 lo tomó en su agenda y lo levantó como un grito feminista en la competencia con Trump.

Entre la noche del 23 y la mañana del 26 de diciembre de 2023, los cristianos de la franja centro del país se vieron sorprendidos dentro de los templos donde celebraban la Nochebuena; otros fueron acribillados por la calle o en sus hogares; sus casas, iglesias, dispensarios médicos y escuelas fueron saqueadas e incendiadas, y sus cosechas de maíz fueron pasto de las llamas. Se calcula en más de 2.500 víctimas de este Nochebuena sangrienta. Esta última Navidad, 170 cristianos fueron asesinados, cuando en Santiago celebrábamos la entrega de regalos en nuestras casas.

En los últimos doce años, cerca de 17.500 iglesias han sido atacadas, se han destruido más de 2.000 escuelas cristianas, y la persecución ha causado al menos 10 millones de personas obligadas a huir o a desplazarse en el norte del país (zona de mayoría musulmana). Nigeria es un país azotado cada vez más por la violencia. En primer lugar, encontramos los conflictos en el norte y noreste, con ataques de distinta intensidad de los terroristas islamistas de Boko Haram y su escisión, el Estado Islámico de África Occidental.

La flagrante inactividad del gobierno ante estos ataques, que dejan unos 200 asesinatos cada mes y se producen de forma cada vez mejor coordinada y con más armamento y medios técnicos, hace que los cristianos hablen de una agenda oculta contra ellos para eliminarlos del país. Las sospechas de los cristianos no son infundadas: desde mayo de 2023, por primera vez el gobierno y el Senado están controlados por los musulmanes (a pesar de que la mayoría del país es cristiana, con casi el 47% de la población) y el anterior presidente, Muhammad Buhari, un ex combatiente de la guerra de Biafra y miembro de la etnia fulani, no escondía sus inclinaciones hacia una Nigeria gobernada por la Sharia.

Conclusión

El genocidio de los cristianos en Nigeria es una tragedia que ha sido ignorada durante demasiado tiempo. La inacción del gobierno y la creciente influencia del fundamentalismo islámico han permitido que esta devastadora persecución continúe, dejando a miles de víctimas a su paso. Es hora de que la comunidad internacional preste atención a este conflicto y exija que se tomen medidas para proteger a los cristianos y poner fin a esta violencia sin precedentes.

Referencias

– Artículo original: "Cristianos en Nigeria: el genocidio olvidado"

– Información adicional sobre el conflicto en Nigeria: Nigeria es un país azotado cada vez más por la violencia. En primer lugar, encontramos los conflictos en el norte y noreste, con ataques de distinta intensidad de los terroristas islamistas de Boko Haram y su escisión, el Estado Islámico de África Occidental.

– Declaraciones de líderes cristianos sobre la inacción del gobierno: La flagrante inactividad del gobierno ante estos ataques, que dejan unos 200 asesinatos cada mes y se producen de forma cada vez mejor coordinada y con más armamento y medios técnicos, hace que los cristianos hablen de una agenda oculta contra ellos para eliminarlos del país.