Introducción
El Servicio Médico Legal (SML) se encuentra sumido en una crisis silenciosa desde la llegada de Marisol Prado como directora nacional. Los funcionarios han levantado duras acusaciones en contra de la militante comunista, generando incertidumbre y sensación de vulnerabilidad en sus puestos de trabajo. En este artículo, exploraremos los cambios y reestructuraciones que han ocurrido en el SML, así como las consecuencias que han tenido en los trabajadores y en la calidad del servicio.
La carga laboral y la alerta de paralización
Una de las principales preocupaciones de los trabajadores del SML es la excesiva carga laboral a la que se enfrentan. Especialmente en la Unidad de Tanatología, los funcionarios han reportado numerosas horas extras sin descanso y sin posibilidad de reemplazo en caso de vacaciones o permisos administrativos. Esta situación ha llevado a que la unidad se encuentre en alerta de paralización desde el 8 de abril pasado.
Ante esta situación, los funcionarios han elevado un petitorio para mejorar las condiciones laborales en el SML a nivel nacional. Entre las demandas se encuentran el pago de las horas extraordinarias desarrolladas en febrero y marzo, así como mejoras en la carrera funcionaria. Los trabajadores señalan que se han contratado nuevos funcionarios sin experiencia forense, en detrimento del personal con trayectoria en el servicio.
El cierre de la Unidad de Derechos Humanos
Otro de los cambios polémicos que ha ocurrido en el SML es el cierre de la Unidad de Derechos Humanos. Esta repartición, creada en 2019, tenía como objetivo realizar diligencias de identificación y determinación de causa de muerte en casos vinculados a violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.
El cierre de esta unidad se debió a la aparición de 89 cajas con osamentas humanas en dependencias de la Universidad de Chile, sin conocimiento de la Unidad de Derechos Humanos. Como resultado, se crearon la Unidad de Víctimas de la Dictadura y la de Alta Complejidad, ambas dependientes del SML metropolitano.
La contratación de Tamara Alvarado
La contratación de Tamara Alvarado como asesora de Gabinete también ha generado controversia en el SML. Los trabajadores denuncian que Alvarado, hija de la presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (AFDD), fue contratada por su relación con Marisol Prado y no por sus méritos profesionales. Además, se cuestiona su alta remuneración, que se estima en más de $2,5 millones.
Ante estos cuestionamientos, la AFDD ha salido en defensa de la gestión de Marisol Prado, respaldando su labor en materia de derechos humanos. Sin embargo, los trabajadores del SML continúan preocupados por posibles conflictos de interés y falta de transparencia en las contrataciones.
Conclusión
La crisis en el Servicio Médico Legal es una realidad que no puede ser ignorada. Los cambios y reestructuraciones ocurridos tras la llegada de Marisol Prado como directora nacional han generado incertidumbre y malestar entre los funcionarios. Es necesario tomar medidas para mejorar las condiciones laborales y garantizar la calidad del servicio que brinda el SML a nivel nacional.