La declaración de Tatiana Rojas pone en entredicho la versión oficial
La exsubsecretaria de Vivienda, Tatiana Rojas, ha confirmado las fechas en las que informó al titular de la cartera, Carlos Montes, sobre las irregularidades en la región de Antofagasta. Esta revelación ha puesto en duda la versión oficial tanto de Montes como de su asesor, Miguel Crispi.
En su declaración ante el Ministerio Público, Rojas señaló que recibió un correo electrónico el 2 de mayo en el que se exponían situaciones irregulares en la región de Antofagasta. Inmediatamente solicitó que se investigara esta información.
Además, Rojas asegura que el 8 de junio entregó toda la información sobre Democracia Viva y otras fundaciones al ministro Montes. Incluyó copias de las minutas entregadas y afirmó que estaban todos los antecedentes necesarios para tomar una decisión.
La incógnita sobre si Montes leyó los documentos
A pesar de haber entregado la carpeta con la documentación, Rojas desconoce si el ministro Montes la leyó o no. En sus propias palabras: «desconozco la razón, no puedo afirmar si lo leyó o no».
Por otro lado, Rojas reveló que antes del 2 de mayo tuvo una reunión con otras jefaturas en el Gabinete del Ministro Montes. Durante esta reunión, el propio Montes le pidió que investigara la posible contratación de profesionales de Revolución Democrática en la Seremi de Antofagasta. Sin embargo, Rojas no pudo confirmar quién le dio esta información.
Conversación con Miguel Crispi y contradicción de versiones
Tatiana Rojas también admitió haber conversado telefónicamente con Miguel Crispi el 7 de junio, contradiciendo la versión del asesor del Segundo Piso de La Moneda, quien afirmó que se enteró por «rumores».
En la conversación, Rojas le informó a Crispi sobre los antecedentes que tenía y le aseguró que el ministro Montes estaba al tanto de la situación. Según Rojas, Crispi quedó tranquilo al saber que se estaban tomando medidas al respecto.
La exsubsecretaria comunica todo a su superior jerárquico
Tatiana Rojas concluye su declaración dejando claro que comunicó toda la información que debía comunicar en el momento adecuado a su superior jerárquico, es decir, al ministro Montes.
Este escándalo ha generado una gran controversia y ha puesto en duda la versión oficial de Montes y Crispi. El Ministerio Público deberá investigar a fondo estas irregularidades para esclarecer la verdad.
