El presidente de Ecuador defiende su polémica decisión
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha generado un gran revuelo internacional al justificar el asalto a la Embajada de México en Quito. Esta acción tenía como objetivo detener a Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Correa, quien había recibido asilo por parte del Gobierno mexicano.
En una entrevista reciente, Noboa afirmó rotundamente: ‘No me arrepiento’. A pesar de la condena casi unánime de la comunidad internacional por violar la inviolabilidad de una sede diplomática, el presidente ecuatoriano argumenta que México fue el primero en violar las convenciones internacionales.
La situación jurídica de Jorge Glas
El exvicepresidente Jorge Glas enfrentaba una orden de detención y prisión preventiva por su presunta participación en el caso de las obras de reconstrucción tras un fuerte terremoto en 2016. Además, debía cumplir una pena de ocho años de cárcel por condenas de cohecho y asociación ilícita.
Aunque el asalto a la embajada fue declarado ilegal y arbitrario por un tribunal ecuatoriano, Glas permanece encarcelado debido a las condenas pendientes en su contra. El exvicepresidente ha rechazado las acusaciones y se considera víctima de ‘lawfare’, es decir, el uso del sistema judicial para perseguir a adversarios políticos.
La postura del presidente ecuatoriano
El presidente Noboa asegura que su decisión de asaltar la embajada no fue para mostrar una imagen de mano dura, sino para demostrar justicia. Afirma que si Glas hubiera escapado utilizando vehículos de la embajada y aviones del Gobierno mexicano, se habría visto como débil. Aunque reconoce que es difícil contentar a todos, la mayoría de la gente en el país está satisfecha con su decisión.
La crisis con México y la búsqueda de soluciones
El asalto a la embajada de México ha llevado a una ruptura de relaciones diplomáticas entre Ecuador y México. Ante esta situación, el presidente ecuatoriano planea solucionar la crisis invitando al presidente mexicano, López Obrador, a almorzar y conversar. Noboa espera poder restablecer las relaciones y resolver los conflictos surgidos a raíz de este incidente.
En resumen, el presidente de Ecuador defiende su controvertida decisión de asaltar la embajada de México argumentando que fue una respuesta a la violación de convenciones internacionales por parte del Gobierno mexicano. Aunque la comunidad internacional ha condenado esta acción, Noboa se mantiene firme en su postura y busca soluciones para resolver la crisis diplomática con México.
