La automatización está transformando la logística
La implementación de robots en la cadena de suministro está revolucionando la forma en que operan los operadores logísticos. Estos robots están impulsando procesos más ágiles y eficientes, con menos errores y mayor seguridad. Según datos recientes, se espera que para el 2024 se instalen alrededor de 600.000 nuevos robots en todo el mundo, lo que representa un aumento del 5% en comparación con el año anterior.
La pandemia por COVID-19 ha acelerado este proceso de automatización en la logística, ya que las empresas buscan agilizar, mejorar y ordenar sus procesos. En Sudamérica, se ha observado un crecimiento significativo en la implementación de robots en los almacenes y centros de distribución. Estas soluciones robóticas están siendo evaluadas por al menos 1 de cada 10 clientes en la región.
Beneficios de la automatización en la logística
La implementación de robots en la logística ofrece una serie de beneficios para los operadores logísticos. Los robots de picking y packing, por ejemplo, pueden procesar pedidos con una precisión cercana al 99,9%, minimizando los errores humanos y mejorando la velocidad de respuesta. Además, los robots móviles autónomos son capaces de gestionar almacenes de manera eficiente, mientras que los robots colaborativos trabajan en conjunto con los empleados en diferentes etapas del proceso logístico.
En Chile, los robots más demandados son los que cumplen funciones de picking y packing, seguidos de los móviles autónomos y los robots colaborativos. Sin embargo, se espera que en los próximos años lleguen nuevos proyectos que revolucionen aún más la industria logística en el país.
La integración de robots y trabajadores humanos
Aunque la automatización es clave en la logística, también es importante la integración de los robots con los trabajadores humanos. Los empleados pueden supervisar y trabajar en conjunto con los robots, asumiendo tareas que requieren habilidades cognitivas, toma de decisiones y creatividad. Los robots están diseñados para complementar las habilidades humanas, no para reemplazarlas.
Es fundamental promover la educación y formación continua en habilidades tecnológicas y digitales para preparar a los trabajadores para los cambios que trae consigo la automatización. Además, es necesario establecer políticas y regulaciones que garanticen una transición justa y equitativa hacia una mayor automatización, protegiendo los derechos y el bienestar de los colaboradores y asegurando que la tecnología beneficie a toda la sociedad.
