Naya Fácil desafía las críticas con su atrevido piscinazo
Naya Fácil dio el gran batacazo en Viña del Mar al consagrarse como embajadora junto con Nicolás Solabarrieta y hasta se animó a un piscinazo que dejó una ola de comentarios. Es que la influencer se lanzó al agua con mucha precaución y luego se tapó la nariz, para finalmente apenas mojarse la cara, sin sumergirse del todo.
Como era de esperarse, le llovieron las críticas por no haber hecho un piscinazo más atrevido, como en ocasiones anteriores. Incluso muchos recordaron que el año pasado, Tita Ureta deslumbró con su sumergida. Ella por su parte, realizó su descargo y señaló que nunca tuvo la posibilidad de ir a aprender natación y señaló que disfrutó mucho el tener su oportunidad. ‘Las personas pobres no tuvimos acceso a clases de natación, hoy me atreví y sin miedo, llegando a Santiago retomaré mis clases de natación y juro que en un tiempo más estaré nadando’, escribió en su cuenta de Instagram. Y añadió: ‘Hice lo mejor que pude, espero les haya gustado mis facilines. Yo lo pasé increíble’, añadió Naya Fácil remarcando que todavía no puede creer que consiguió ser la nueva embajadora.
El piscinazo de Naya Fácil
Cabe remarcar que en esta oportunidad, la figura de internet apareció en bata, acompañada por dos bailarines, quienes hicieron un breve baile junto con ella. Luego, quedó cubierta solo con un traje de baño dorado, lleno de mariposas. Antes de lanzarse al agua y mientras agradecía a todos por el apoyo, la influencer contó que eligió estas figuras porque representan la evolución y la resiliencia. En tanto que el color tuvo que ver con la Gaviota de Oro. ‘Y el brillo es porque siempre hay que brillar en la vida’, mencionó al final de su discurso, provocando los aplausos de todos los que estaban presentes en el lugar para disfrutar de su piscinazo.
‘Todo lo que he logrado es gracias a mis facilines y gracias al apoyo de la prensa así que estoy muy feliz de vivir este momento’, dijo Naya Fácil emocionada y conmovida por el apoyo incondicional del público, cuando se había mostrado un poco pesimista sobre su elección.