La polémica en el Festival de Viña
El exitoso paso de Luis Slimming por el Festival de Viña ha generado una gran controversia en los últimos días. Durante su presentación, el comediante lanzó un chiste sobre Paul Vásquez, conocido como El Flaco, en el que hizo referencia a su pasada adicción a las drogas.
En su rutina, Slimming mencionó que un comediante clásico contó que gastaba más de 800 mil pesos semanales en cocaína. Luego, hizo una pregunta irónica sobre cómo este humorista consumía drogas durante una rutina de una hora y media en el Festival de Viña.
El deseo de El Flaco
Antes de su presentación, Paul Vásquez expresó su deseo de que Slimming no contara ese chiste prohibido y que simplemente disfrutara del escenario de la Quinta Vergara. El comediante aseguró que el chiste que contó en Viña era el mismo que tenía planeado desde un principio y que nunca fue otro.
Además, Slimming reveló que había hablado con El Flaco sobre el chiste en el pasado y que este le había dado permiso para contar cualquier chiste siempre y cuando fuera en pos de hacer reír.
El chiste prohibido que no se contó
Contrario a lo que muchos pensaban, el verdadero chiste prohibido que Luis Slimming no dijo en el Festival de Viña no tenía relación con las drogas. Según el comediante, este chiste no fue contado en el Festival de Olmué debido a temas de marcas.
El chiste en cuestión hacía referencia a que la droga le hacía bien a El Flaco y que ahora, aunque sigue siendo bueno, es como una piscola con Pepsi en lugar de Coca-Cola.
En conclusión, la polémica generada por Luis Slimming en el Festival de Viña se centró en un chiste sobre la adicción a las drogas de El Flaco. Sin embargo, el verdadero chiste prohibido no fue sobre este tema, sino que fue omitido en el Festival de Olmué por cuestiones de marcas. A pesar de la controversia, Slimming aseguró que siempre buscó hacer reír al público y que contó con el permiso de El Flaco para hacerlo.