La desesperación de Ivan Cantu
“No me quiero morir”. Con esa breve pero directa frase se resume la desesperación de Ivan Cantu, un latino de 50 años que espera en la prisión Allan B. Polunsky, en West Livingston (Texas), a 50 km de Houston, por su inminente ejecución, la cual está prevista para el 28 de febrero.
En entrevista con Telemundo, medio que tuvo una hora para conversar con Cantu, el acusado expone sus sensaciones, aseverando que es inocente de los cargos que se le imputan.
Una lucha por la justicia
Desde el primer día, Cantu ha afirmado que había mucho por investigar en su caso y que podía probar su inocencia. Sin embargo, sus palabras no fueron escuchadas y su petición de revisión fue ignorada.
“Sólo faltan días para que quieran ponerme en una camilla (para recibir la inyección letal) por un crimen que no cometí. Estamos haciendo todo lo posible para presentar la información a las cortes, pero es como si no les importara”, remarcó Cantu.
Condenado en octubre de 2001, Cantu ha visto cómo su ejecución ha sido aplazada en dos ocasiones, pero ahora las autoridades han establecido una fecha definitiva. A pesar de las irregularidades en su proceso y de la evidencia que demuestra su inocencia, la pena de muerte sigue siendo una amenaza inminente.
Las irregularidades en el caso
En la entrevista, Cantu señala que hubo irregularidades durante el proceso y que la evidencia comprueba su inocencia. Según él, la Fiscalía no investigó a fondo su caso y se basó en declaraciones falsas y en una narrativa falsa presentada por el Departamento de Policía de Dallas.
“Presentaron la información a un jurado y le pidieron que me condenaran. Y lo hicieron”, puntualizó Cantu.
Además, Cantu afirma que tanto el presidente del jurado como otros miembros, e incluso miembros de la policía, han declarado que con la información que manejan hoy en día no lo habrían condenado ni sentenciado a muerte.
La lucha por la vida
A pesar de la evidencia que demuestra su inocencia, Cantu se enfrenta a la inminente ejecución. Sin embargo, aún tiene algunas vías para buscar justicia. Puede apelar a la Junta de Indultos y Libertad Condicional del estado de Texas o puede solicitar la intervención del gobernador, Greg Abbott.
Organizaciones como Amnistía Internacional han mostrado su apoyo a Cantu y han destacado que las leyes internacionales prohíben la pena de muerte cuando no existen pruebas claras y convincentes que respalden la condena.
Una historia que conmociona
La historia de Ivan Cantu es una muestra de la injusticia que puede existir en el sistema judicial. A pesar de afirmar su inocencia y de contar con evidencia que respalda su versión, su vida está en peligro.
Esperamos que su caso sea revisado de manera justa y que se haga justicia. Nadie merece morir por un crimen que no cometió.
