Cinco consejos infalibles para mantenerte hidratado mientras haces deporte en verano

La importancia de la hidratación en el deporte durante el verano

El verano ha llegado y se espera que venga acompañado de intensas olas de calor. Por eso, es fundamental prestar especial atención a la hidratación, especialmente para aquellos que practican deportes o actividades al aire libre. La hidratación es esencial para mantener una buena salud y mejorar el rendimiento deportivo, ya que permite el adecuado funcionamiento de las funciones corporales y vitales.

Según los expertos, se espera que los termómetros superen los 43 °C en la zona centro-sur del país durante esta temporada. Ante este escenario, es importante seguir ciertos consejos para evitar la deshidratación y sus consecuencias.

Consejos para mantenerse hidratado durante el verano

La cantidad de agua que se debe consumir varía según diversos factores, como el horario y la duración del ejercicio, el estado de hidratación previo, la edad y el género de la persona, así como las condiciones ambientales. Sin embargo, existen algunas recomendaciones generales que pueden ayudarte a mantener una adecuada hidratación durante el verano:

1. Bebe agua antes, durante y después del ejercicio: Se sugiere beber diariamente 30 a 35 ml por kilo de peso. Antes de realizar ejercicio, toma aproximadamente 500 ml de líquido dos horas antes. Durante la práctica, bebe 250 ml cada 15 minutos o 500 ml cada 30 minutos para reponer el agua perdida por la sudoración. Después del ejercicio, ingiere 500 ml durante los primeros 30 minutos para recuperar los líquidos perdidos.
2. Mantén la temperatura del agua adecuada: La temperatura ideal del agua debe oscilar entre 15 y 21 °C para una mejor absorción y digestión.
3. Agrega electrolitos y/o consume bebidas deportivas: Si el ejercicio dura más de una hora o se realiza durante las horas de mayor calor, se recomienda agregar cantidades apropiadas de electrolitos (sales minerales) y/o consumir bebidas deportivas para reponer los nutrientes perdidos.

Los riesgos de la deshidratación en el deporte

Experimentar deshidratación puede tener graves consecuencias para la salud y el rendimiento deportivo. La sensación de sed es el primer signo de deshidratación, y si no se atiende a tiempo, puede reducir el rendimiento del deportista e incluso ocasionar problemas más serios, como el aumento en la frecuencia cardiaca y presión arterial, bajos niveles de sodio en la sangre (hiponatremia) e incluso golpe de calor.

En conclusión, mantener una adecuada hidratación durante el verano es fundamental para evitar problemas de salud y mejorar el rendimiento deportivo. Sigue los consejos mencionados anteriormente y disfruta de tus actividades al aire libre sin preocupaciones.