La alarmante realidad de la violencia armada en Chile
La Defensoría de la Niñez, a través de su Observatorio de Derechos, ha dado a conocer cifras que revelan una dura realidad: durante el año 2023, un total de 38 niños, niñas y adolescentes fueron asesinados con armas de fuego en Chile. Estos datos son el resultado de un estudio realizado con el fin de visibilizar la situación de la niñez y adolescencia en medio de la crisis de seguridad que atraviesa el país.
El análisis se basa en datos proporcionados por el Ministerio de Salud, que muestran un preocupante aumento de los indicadores de violencia hacia la niñez y adolescencia. En comparación con el año 2019, se ha identificado un incremento en los homicidios, lesiones y violencia sexual que resulta altamente preocupante, según la Defensoría de la Niñez.
Las cifras por región
Al desagregar la información por región, el Observatorio de Derechos de la Defensoría de la Niñez muestra que la Región Metropolitana lidera la lista con un total de 25 defunciones por armas de fuego en el año 2023, seguida de Bío Bío con 4. Sin embargo, al analizar la tasa por cada 100 mil habitantes, la región de Tarapacá es la que presenta una mayor tasa en todo el país, seguida de la región del Bío Bío.
En cuanto a las comunas, el Observatorio destaca que Iquique es la que presenta la mayor cantidad de casos en el país, con nueve defunciones por este tipo de fallecimiento entre 2021 y 2023, seguida de San Bernardo y Renca.
La importancia de prevenir la violencia armada
El defensor de la Niñez, Anuar Quesille, advierte que la violencia hacia los niños, niñas y adolescentes es inaceptable y terrible, pero también es prevenible. No poner esfuerzos en prevenir esta violencia significa omitir la responsabilidad que tenemos todos en proteger a los niños y adolescentes contra toda forma de violencia que afecta su supervivencia y desarrollo integral.
Quesille destaca que este análisis realizado por la Defensoría de la Niñez tiene como objetivo aportar a la toma de decisiones de las autoridades competentes, para generar políticas públicas específicas y bien definidas que reduzcan las desigualdades estructurales que impiden el ejercicio de los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Además, se busca generar acciones para la prevención y no repetición de vulneraciones de derechos humanos.
Un problema que requiere atención urgente
Estos hechos relacionados con el uso de armas de fuego se suman a la preocupante situación identificada por el Observatorio de Derechos de la Defensoría de la Niñez en septiembre de 2023. En ese momento, se reveló un aumento del 173% en los casos policiales por uso de armas en los establecimientos educacionales entre 2019 y 2022, lo que pone de manifiesto la magnitud de este problema.
Es necesario tomar medidas urgentes para prevenir la violencia armada y proteger a los niños, niñas y adolescentes de Chile. Solo así podremos garantizar un futuro seguro y libre de violencia para las generaciones venideras.
