El Reloj del Apocalipsis: una advertencia inquietante
El Reloj del Apocalipsis, o Doomsday Clock en inglés, es un impactante símbolo creado en 1947 por la junta directiva del Boletín de Científicos Atómicos, destacando figuras eminentes como Albert Einstein y Robert Oppenheimer, junto con otros prominentes científicos. Concebido como una representación simbólica, el reloj inicialmente reflejaba la proximidad de la humanidad a la destrucción total debido a la amenaza inminente de una guerra nuclear. A lo largo de las décadas, el reloj del apocalipsis ha evolucionado para abordar diversas amenazas existenciales, incorporando factores como el cambio climático y los avances tecnológicos.
Apocalipsis, ¿cercano? Este instrumento sigue siendo un recordatorio impactante de la urgencia de abordar los desafíos que enfrenta nuestro mundo en busca de un futuro más seguro y sostenible.
Los nuevos anuncios inquietantes
A poco de haber iniciado el 2024 se conocieron los nuevos anuncios inquietantes del reloj del apocalipsis. Esta vez se tuvo en cuenta la realidad que atraviesa la humanidad y las posibilidades de una catástrofe sin precedentes producto de las malas decisiones que se han tomado con respecto al cuidado del planeta.
Durante la noche del 24 de enero, como es tradición anual, se reveló la inquietante ubicación del Reloj del Apocalipsis o fin del mundo. Una vez más, en consonancia con el año anterior, el reloj se fijó a 90 segundos antes de la medianoche, marcando las 23:58:30 horas y dejando a la humanidad en su posición más cercana a una posible catástrofe global. Tras presentar las conclusiones a través del sitio oficial de la junta directiva del Boletín de Científicos Atómicos, la presidenta y directora ejecutiva, Rachel Bronson, expresó su preocupación al afirmar que ‘las tendencias continúan apuntando ominosamente hacia una catástrofe global’.
Este sombrío indicador subraya la urgencia de abordar los desafíos críticos que enfrenta nuestro planeta para evitar consecuencias desastrosas que indefectiblemente derivarían en el apocalipsis. En tal sentido, cada ser humano debe aportar su granito de arena. ‘La investigación biológica destinada a prevenir futuras pandemias ha demostrado ser útil, pero también presenta los riesgos de causar una’, describió la especialista, quien también advirtió sobre la inteligencia artificial. ¿Estará cercano el apocalipsis?