Una sanción injusta
La árbitra nacional, Cindy Nahuelcoy, ha sido protagonista de una historia de injusticia y lucha en el mundo del arbitraje. Recientemente, recibió una sanción de 30 partidos por parte del Tribunal de Disciplina de la ANFP debido a sus acusaciones contra su colega Leslie Vásquez y Julio Bascuñán.
En una entrevista con Las Últimas Noticias, Nahuelcoy expresó su dolor y frustración ante esta sanción. Se sintió tratada como una delincuente, a pesar de no haber cometido ningún acto violento. Simplemente denunció algo que consideraba incorrecto.
La lucha por la verdad
Nahuelcoy no se arrepiente de haber denunciado lo que consideraba una injusticia. A pesar de que reconoce que la forma en que lo hizo pudo no ser la correcta, sostiene firmemente sus acusaciones. Incluso ha recibido apoyo privado de otros árbitros que saben que habló con la verdad, pero temen represalias si lo dicen públicamente.
La árbitra lamenta haber confiado en personas y superiores que la involucraron en un escándalo y luego le dieron la espalda. Esta experiencia ha dejado una profunda huella en su vida y ha puesto en duda su regreso al arbitraje.
Un futuro incierto
A sus 35 años, Nahuelcoy se encuentra en una encrucijada. Aunque ama el arbitraje y ha sacrificado mucho para llegar a donde está, no sabe si desea continuar en este camino. La sanción injusta y el tiempo que ha pasado desde entonces han hecho que se cuestione si seguir arbitrando es lo que realmente la llena.
La árbitra menciona la posibilidad de explorar otras opciones, como los negocios, una pasión que también le interesa. Aunque no tiene una respuesta definitiva, está considerando seriamente la idea de no regresar al arbitraje.
Una historia de injusticia y lucha
La historia de Cindy Nahuelcoy es un ejemplo de cómo la injusticia puede afectar la vida de una persona. Su valentía al denunciar lo que consideraba incorrecto la llevó a enfrentar una sanción injusta y a cuestionar su futuro en el arbitraje.
Esperamos que esta historia sirva como un llamado a la reflexión sobre la importancia de la justicia y la honestidad en el deporte. Nadie debería ser castigado por decir la verdad y luchar por lo que cree.
