¡Descubre cómo los agricultores podrán predecir la sequía con meses de anticipación!
El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA), vinculado al Ministerio de Agricultura, ha creado un instrumento tecnológico revolucionario que permitirá a los agricultores conocer con tres meses de antelación los niveles de sequía agrícola que enfrentarán durante el verano. Esta innovadora solución proyecta las condiciones de la vegetación y predice los niveles de sequía entre la región de O’Higgins y La Araucanía para el verano 2024.
El primer informe de pronóstico se lanzará en octubre y brindará una estimación de la condición de la vegetación para el verano, lo que permitirá anticipar las posibles comunas afectadas por la sequía agrícola. De esta manera, se podrán adoptar medidas preventivas para mitigar los efectos de la escasez de lluvias.
Marcel Fuentes, Investigador de INIA y director del proyecto de predicción de sequía agrícola, enfatiza que la sequía es una amenaza natural que representa un riesgo constante para la mayoría de los productores. La falta de lluvia impide satisfacer las necesidades de riego de las plantas, lo que puede generar graves consecuencias para los cultivos y pérdidas económicas significativas para los agricultores.
El éxito del producto de monitoreo satelital ha sido evidente, pero es crucial adelantarse a los impactos futuros de la sequía a través de un pronóstico. Esto ayudará a las autoridades en la planificación y optimización de la distribución de los recursos económicos y el mejor manejo del agua de riego.
La directora nacional de INIA, Iris Lobos, destaca que la institución realiza monitoreos satelitales de la vegetación y de la sequía agrícola mes a mes. Estos informes proporcionan información relevante a las autoridades regionales y nacionales sobre la declaración de zonas en emergencia agrícola. La anticipación a los niveles de sequía agrícola permitirá que las autoridades del ministerio tomen decisiones preventivas oportunamente y gestionen los territorios de manera eficiente.
Sequía en Chile
En Chile, uno de los eventos de aridez agrícola más graves ocurrió entre los años 1967 y 1969, afectando desde Atacama a Ñuble. Este evento provocó pérdidas económicas que alcanzaron los mil millones de dólares y un desempleo de 430 mil trabajadores agrícolas.
Actualmente, el país enfrenta más de 10 años de bajas precipitaciones y cambios climáticos que han afectado los procesos de la agroindustria nacional. Como resultado, gran parte de los cultivos se han trasladado hacia el sur.
El equipo de Riesgo Climático de INIA utiliza imágenes satelitales y algoritmos matemáticos para elaborar informes mensuales sobre el estado agroclimático de todas las regiones del país. Este nuevo reporte predictivo ha demostrado una asertividad del 95 %, lo que lo convierte en una herramienta confiable para los agricultores.
