El paso efímero de Benjamín Lagos por Gran Hermano
Benjamín Lagos, un joven tiktoker de 21 años, se convirtió en el primer eliminado de Gran Hermano. A pesar de su corta participación en el reality, ha sido víctima de una serie de comentarios negativos y bullying en las redes sociales.
Estos ataques constantes han afectado profundamente a Lagos, quien ha tomado una drástica decisión: cerrar sus redes sociales. En un emotivo anuncio, el joven confesó que está enfrentando una depresión y que se siente como el ser más nefasto de la sociedad.
El síndrome del impostor y la pérdida de esperanza
En sus propias palabras, Lagos reveló que la constante repetición de que es un chanta y un impostor ha minado su confianza en sí mismo. Ha llegado al punto de creerse esas críticas y sufre del Síndrome del Impostor, una sensación de no ser lo suficientemente bueno y de ser un fraude.
Además, el joven compartió que ha pensado que es lo más nefasto de la sociedad por tratar de ayudar a los demás. Su contenido de autoayuda en TikTok ha sido objeto de burlas y críticas, lo que ha contribuido a su estado emocional actual.
El bullying en las redes sociales
Lagos también hizo hincapié en que ninguno de los eliminados de Gran Hermano se ha salvado del bullying en las redes sociales. A pesar de que el reality es una oportunidad para mostrar su personalidad y talento, muchos participantes se enfrentan a comentarios negativos y ataques constantes en línea.
Ante esta situación, Lagos ha decidido tomar un descanso de las redes sociales. Aunque no tiene un tiempo definido, espera poder recuperarse emocionalmente y encontrar la fuerza para enfrentar nuevamente el mundo virtual.
Conclusiones
El caso de Benjamín Lagos es un ejemplo de cómo el bullying en las redes sociales puede afectar profundamente la salud mental de una persona. Es importante recordar que detrás de las pantallas hay seres humanos con sentimientos y que nuestras palabras pueden tener un impacto significativo en sus vidas.
Esperamos que Lagos encuentre el apoyo y la ayuda necesaria para superar esta difícil etapa. Y recordemos, seamos conscientes de nuestras palabras y tratemos de construir un entorno en línea más amable y respetuoso para todos.