Una propuesta que deja un sabor amargo
Los diputados de Renovación Nacional expresaron su descontento tras una reunión con la ministra del Trabajo, Jeanette Jara, y el ministro de Hacienda, Mario Marcel, en la que se presentó una polémica propuesta sobre la reforma previsional. Frank Sauerbaum, jefe de bancada de diputados de RN, declaró: ‘Me voy con un sabor más amargo que la primera vez’.
La diputada Ximena Ossandón también manifestó su decepción, afirmando que la semana anterior tenían la sensación de estar acercándose a un acuerdo. Por su parte, Eduardo Durán señaló que el gobierno insiste en su propuesta de no entregar el aumento de la cotización adicional del 6% a la cuenta individual de cada trabajador, alegando que eso es lo que la gente desea.
Una figura similar con un nuevo enfoque
Según explicó Frank Sauerbaum, la reunión se centró en cómo administrar este 6% adicional. El gobierno propone una figura similar al proyecto inicial, en la que un porcentaje importante iría a una cuenta administrada por el Estado, similar a la nocional, y un 2% se destinaría a una cuenta individual.
Ximena Ossandón expresó su sorpresa al descubrir que las cuentas nocionales no estaban tan descartadas como pensaban, comparándolas con el dicho popular: ‘Es como el mismo perro con otro collar’.
La solidaridad y los fondos de los trabajadores
Eduardo Durán reiteró la importancia de la solidaridad, pero enfatizó que esta debe realizarse a través de los impuestos generales de la Nación. Según él, el Estado no debe hacerse cargo ni manejar los fondos de los trabajadores, ya que se ha evidenciado un mal uso de estos fondos en beneficio de algunas fundaciones, sin llegar a quienes más lo necesitan. Frank Sauerbaum coincidió con esta postura, afirmando que la solidaridad debe llevarse a cabo mediante impuestos generales.
Conclusiones
La propuesta del gobierno sobre la reforma previsional ha dejado un sabor amargo en los diputados de Renovación Nacional. Aunque reconocen la importancia de mejorar las pensiones, expresan su descontento con la forma en que se pretende administrar el 6% adicional de cotización. Consideran que la solidaridad debe realizarse a través de los impuestos generales y no a costa de los fondos de los trabajadores.
