Un informe explosivo expone presuntas irregularidades y tratos turbios en la contratación de artistas para el prestigioso Festival de Viña del Mar.

¡Escándalo en Viña del Mar! Revelaciones impactantes sobre posibles irregularidades en el famoso festival

Alarma y consternación han causado las recientes denuncias de supuestas irregularidades en la contratación de artistas para el emblemático Festival de Viña del Mar, según un explosivo reportaje de Interferencia.

Un juego de poder y dinero

El reportaje, firmado por la periodista Laura Landaeta, expone un presunto duopolio entre la productora Bizarro y ejecutivos de TVN, que habrían colaborado para obtener beneficios personales a gran escala.

Acusaciones preocupantes

Las fuentes de la investigación revelan varias irregularidades, destacando que la productora exclusiva del certamen es Bizarro, propiedad de Alfredo Alonso y Peter Heller, quienes también poseen la concesión del centro de eventos Arena Movistar. Esta dualidad genera un ambiente de poca transparencia.

Control absoluto

De acuerdo con el informe, Bizarro incluso habría introducido una cláusula en los contratos de este año que establece que todo artista que se presente en Viña será representado por ellos durante todo el año. Este hecho ha generado indignación y preocupación entre los productores de eventos.

Implicaciones más profundas

El informe de Interferencia va más allá, mencionando una serie de denuncias previas a 2019 sobre falta de probidad por parte de los organizadores del festival. Las acusaciones van desde sobreprecios por artistas hasta negociaciones turbias para ganar un cupo en la competencia.

¿Quién tiene el control?

Es sorprendente, señala el informe, que los miembros de la organización que han sido señalados en estas acusaciones sigan siendo ejecutivos de TVN y mantengan en sus manos el destino del festival, en colaboración con Bizarro.

Conclusión

Estas acusaciones ponen en duda la transparencia y la integridad del Festival de Viña del Mar. Sin duda, esta es una historia en desarrollo que vale la pena seguir de cerca.