Héroes Caídos: Honrando a los Valientes Carabineros Asesinados en Cañete
En un acto de profunda tragedia, la institución de Carabineros de Chile ha sufrido la pérdida de tres de sus más valientes miembros, quienes entregaron sus vidas en el cumplimiento del deber. El sargento primero Carlos José Cisterna Navarro, de 43 años, y los cabos primeros Sergio Antonio Arévalo Lobo, de 34 años, y Misael Magdiel Vidal Cid, de 30 años, son los nuevos mártires de esta noble institución, asesinados en un atentado ocurrido en la ciudad de Cañete.
Vidas Dedicadas al Servicio
Estos tres hombres contaban con una dilatada trayectoria en Carabineros, habiendo servido a la comunidad con entrega y profesionalismo. El sargento primero Cisterna Navarro, nacido en Lebu, tenía 24 años de servicio y dejó atrás a un hijo de 6 años. Sus primeros destinos fueron la 2ª Comisaría de Collipulli y la ex Tenencia de Ercilla, para luego formar parte de la ex Subcomisaría de Fuerzas Especiales Malleco. En 2011, llegó al Retén Curaco en Collipulli, y en 2013 se trasladó a la Región del Biobío, donde se desempeñó en la 2ª Comisaría de Lebu hasta que, en 2016, se unió a la 4ª Comisaría COP Los Álamos, donde sirvió hasta su fallecimiento.
Por su parte, el cabo primero Sergio Antonio Arévalo Lobo, nacido en Lebu, ingresó a la institución en 2010 y se desempeñó en la 5ta. Comisaría Quirihue hasta que, en 2016, llegó a la 4ta Comisaría COP Los Álamos, donde se mantuvo hasta su trágico final. Durante su carrera, recibió cuatro felicitaciones por su alto grado de profesionalismo.
El cabo Misael Magdiel Vidal Cid, nacido en Concepción, se unió a Carabineros en 2014, siendo destinado inicialmente a la 54ª. Comisaría Huechuraba. En 2016, se incorporó a la 4ª Comisaría COP Los Álamos, donde sirvió hasta su muerte. En 2022, recibió una felicitación por su profesionalismo, eficacia, compromiso y entrega.
Legado de Servicio y Sacrificio
Estos tres hombres, en el cumplimiento de su deber, han dejado un legado de servicio, valor y sacrificio que servirá de inspiración para las generaciones futuras de Carabineros. Sus vidas, entregadas en defensa de la seguridad y el bienestar de la comunidad, serán recordadas como un ejemplo de la abnegación y el compromiso que caracterizan a esta noble institución.
Conclusión
En estos momentos de dolor y luto, la nación chilena se une para honrar la memoria de estos tres valientes carabineros, quienes entregaron lo más preciado que tenían: sus vidas. Su sacrificio no será olvidado, y servirá como un recordatorio permanente del alto precio que a veces se debe pagar para mantener la seguridad y el orden en nuestra sociedad.
