Una tragedia que conmociona a Antofagasta
En un hecho que ha dejado consternada a la comunidad educativa de Antofagasta, una profesora de la Escuela D-68 José Papic Radnic ha decidido quitarse la vida tras sufrir constantes acosos, agresiones y amenazas por parte de una alumna y su apoderada. Katherine Yoma Valdivia, docente de Inglés, no pudo superar los cuadros de ansiedad, depresión y miedo ocasionados por estos ataques.
El Colegio de Profesores ha informado sobre este trágico suceso, destacando que la profesora había denunciado previamente las agresiones y amenazas que recibía en el establecimiento educacional. Sin embargo, solo recibió dos días de reposo, mientras que la estudiante involucrada no fue retirada del colegio.
La falta de apoyo y protección
En su denuncia, Katherine Yoma relató que, a pesar de que las amenazas de muerte son consideradas una falta gravísima según el manual de convivencia escolar, no recibió la protección necesaria y se sintió completamente sola. Esta situación ha generado indignación entre los profesores de Antofagasta, quienes exigen que se cumplan los protocolos para hacer frente al acoso en los establecimientos educativos.
El Colegio de Profesores ha solicitado justicia y medidas preventivas para evitar que tragedias como esta vuelvan a ocurrir. Es fundamental que se brinde un ambiente seguro y protegido para los docentes, quienes desempeñan una labor fundamental en la formación de las futuras generaciones.
Un llamado a la acción
Ante esta lamentable situación, los profesores de Antofagasta han anunciado una paralización como forma de protesta y para exigir que se tomen medidas concretas para prevenir y abordar el acoso en los colegios. Es necesario que las autoridades educativas y los establecimientos se comprometan a garantizar la seguridad y el bienestar de los docentes.
La tragedia de Katherine Yoma Valdivia debe ser un llamado de atención para toda la sociedad. No podemos permitir que el acoso y la violencia se normalicen en nuestras escuelas. Es responsabilidad de todos trabajar juntos para crear entornos educativos seguros y libres de violencia.
