El impacto de los ultraprocesados en la salud mental
Las bebidas de fantasía, nuggets, papas fritas en bolsa y otros productos ultraprocesados no solo aumentan el riesgo de padecer demencia y cáncer, sino que también se ha confirmado recientemente que están asociados con un mayor riesgo de causar depresión. Un estudio publicado en la revista JAMA Open Network reveló que las mujeres que consumían más de nueve porciones de alimentos ultraprocesados al día tenían un 50% más de probabilidades de desarrollar depresión en comparación con aquellas que consumían no más de cuatro porciones diarias.
El estudio se basó en el análisis de los hábitos alimentarios y la salud mental de 31 mil mujeres de entre 42 y 62 años. Los resultados mostraron que el consumo excesivo de alimentos y bebidas elaborados con edulcorantes artificiales era particularmente perjudicial. Los autores concluyeron que una mayor ingesta de alimentos ultraprocesados, especialmente aquellos que contienen edulcorantes y bebidas endulzadas artificialmente, se asociaba con un mayor riesgo de depresión.
¿Qué son los alimentos ultraprocesados?
Según la clasificación Nova, los alimentos se dividen en cuatro grupos según su grado de procesamiento. Los alimentos sin procesar o mínimamente procesados son aquellos de origen animal o vegetal que no han sido sometidos a procedimientos industriales. Ejemplos de estos alimentos son las frutas, verduras, legumbres, carnes y leches.
El segundo grupo está compuesto por ingredientes culinarios procesados, como los aceites y el azúcar de caña. Le siguen los alimentos procesados elaborados, como el pan, los quesos o la fruta en conserva. En la última categoría se encuentran los alimentos ultraprocesados, que son considerados sustancias extremadamente dañinas y no se consideran realmente alimentos según Nova.
Los alimentos ultraprocesados son productos industriales derivados de alimentos y otras sustancias sintetizadas. Estos productos pasan por un proceso de hidrogenación, transformándose en grasas sólidas. Algunos ejemplos de alimentos ultraprocesados son las papas fritas en bolsa, las barras de cereal, las bebidas de fantasía, las hamburguesas, los nuggets, las galletas y otros snacks. También se incluyen en esta categoría las comidas listas para servir.
Conclusión
Este estudio revela una vez más los peligros de los alimentos ultraprocesados para la salud mental. El consumo excesivo de estos productos puede aumentar significativamente el riesgo de desarrollar depresión. Es importante tomar conciencia de los efectos negativos de estos alimentos y optar por una alimentación más saludable y equilibrada. Priorizar alimentos frescos y naturales es fundamental para cuidar nuestra salud mental y emocional.
