En una nueva muestra de la preocupante violencia que ha azotado al fútbol chileno, la barra de Colo Colo protagonizó una violenta pelea en el Estadio Nacional durante un encuentro de la Liga de Primera División. Ante esta situación, el Gobierno no ha dudado en tomar medidas drásticas, presentando una querella judicial contra el club y sus máximos dirigentes.
Los incidentes ocurrieron minutos después del inicio del partido entre Colo Colo y Deportes Limache. Según el informe, un grupo de aproximadamente cien personas que se encontraban en la Galería Norte del recinto comenzaron a pelear, llegando incluso a utilizar elementos cortopunzantes como cuchillos y bastones ortopédicos. Estos objetos prohibidos lograron ser introducidos en el estadio debido a las deficiencias de seguridad existentes.
Gobierno demanda a Colo Colo y sus directivos
Ante esta situación, el Ministerio de Seguridad Pública no tardó en actuar. A través de un recurso judicial, el Gobierno presentó una querella en contra de la concesionaria Blanco y Negro, responsable de la administración del club ‘Cacique’. La denuncia fue formalizada por el secretario de Estado, Luis Cordero, y presentada por el abogado Francisco Berthet.
La acusación no solo apunta a los responsables inmediatos de los hechos, sino también a los máximos dirigentes de Colo Colo, entre los que se encuentran el presidente Aníbal Mosa, el vicepresidente Eduardo Loyola, y otros miembros clave del directorio como Alfredo Stöhwing, Ángel Maulén y Alejandro Paul.
Deficiencias de seguridad en el Estadio Nacional
Según el documento presentado, la violenta pelea se desató debido a las deficiencias en la seguridad del Estadio Nacional. Los objetos cortopunzantes y otros elementos prohibidos, como fuegos artificiales, lograron ser introducidos en el recinto, lo que facilitó el desencadenamiento de los incidentes.
Además, se reportaron casos de «escalamiento de estructuras durante el desarrollo del encuentro», lo que evidencia la falta de control y medidas de seguridad adecuadas en el estadio.
Gobierno toma medidas drásticas
Con esta querella, el Gobierno busca responsabilizar no solo a los hinchas involucrados directamente en los hechos, sino también a los máximos dirigentes de Colo Colo, a quienes se les atribuye una responsabilidad por la falta de control y prevención de la violencia en el estadio.
Esta acción legal representa un paso firme del Ejecutivo para combatir la creciente ola de violencia que ha afectado al fútbol chileno en los últimos años. El Gobierno espera que esta medida envíe un mensaje claro a los clubes y sus directivos, quienes deberán asumir un mayor compromiso con la seguridad de los aficionados y el orden en los recintos deportivos.
 
 
 
                                     
