La startup chilena Umov acaba de presentar la validación clínica de su dispositivo ALBA, una innovación nacional diseñada para la rehabilitación de pacientes con debilidad motora en la parte superior del cuerpo, especialmente aquellos que han sufrido un accidente cerebrovascular (ACV).
Pamela Salazar, ingeniera y CEO de Umov, explica que «Nuestro desafío es poder entregar soluciones efectivas y accesibles a las personas para su proceso de rehabilitación. En el caso de ALBA, lo hace de manera lúdica, gamificada y personalizada, activando el tren superior, haciendo terapia motriz y cognitiva al mismo tiempo».
¿Cómo Funciona ALBA?
El dispositivo, que ha estado en desarrollo durante varios años, permite un trabajo kinésico y cognitivo en la parte superior del cuerpo, incluyendo el tronco, el cuello y los brazos. Su interfaz física consiste en una mesa interactiva con una manilla que se traslada sobre rieles multieje, permitiendo ejercicios en todas las direcciones. Mientras tanto, una pantalla táctil permite ajustar la máquina a las necesidades individuales del usuario, entregando retroalimentación en todo momento y de manera gamificada.
De esta forma, ALBA ofrece actividades motrices autónomas para la rehabilitación de los pacientes, sin la necesidad de que un profesional especializado esté presente todo el tiempo. Además, proporciona información precisa que permite medir el progreso del paciente a través del profesional de la salud.
Validación Clínica Exitosa
El ensayo clínico fue llevado a cabo por investigadores del Instituto de Ciencias del Ejercicio y la Rehabilitación de la Universidad Andrés Bello (UNAB), y se aplicó en la Clínica Los Coihues, que ya cuenta con un dispositivo ALBA para sus pacientes. Se trató de un estudio controlado aleatorio en el que participaron 32 adultos que habían sufrido un ACV subagudo o crónico, y demostró que el tratamiento experimental con la máquina es «al menos» tan eficaz como las terapias convencionales.
De hecho, se pudo establecer que incorporar el dispositivo ALBA a la rehabilitación de los pacientes con ACV, en sus etapas subaguda o crónica, mejora tanto la función motriz como las capacidades cognitivas. Cabe señalar que ALBA no fue diseñado como un dispositivo de reemplazo, sino como una herramienta de optimización para pacientes y centros de salud.
Expandiendo el Alcance de la Rehabilitación
Ahora, la startup Umov busca masificar su invento para distribuirlo en centros de salud de todo el país. Según Pamela Salazar, «El objetivo del dispositivo no es solo mejorar la rehabilitación en personas y mejorar su adherencia al tratamiento, sino que también permitir a los centros de salud aumentar el flujo de atención. Es decir, si en una hora de atención un profesional puede atender a un paciente, una mezcla de supervisión humana e interacción autónoma con la máquina le permitirá atender a dos».
Con ALBA, la rehabilitación de pacientes con ACV está dando un salto cualitativo, combinando la eficacia terapéutica con la accesibilidad y la innovación tecnológica. Este invento chileno se perfila como una solución integral que mejora la calidad de vida de quienes han sufrido un accidente cerebrovascular.