El desaforado diputado Mauricio Ojeda, investigado por fraude al fisco en la arista Manicure del caso Convenios, ha acusado un «ataque político» tras la decisión de la Corte de Apelaciones de Temuco de ordenar su prisión preventiva.
Fue el pasado viernes que el parlamentario dejó el Anexo Capitán Yáber, donde cumplía la prisión preventiva, para cumplir el arresto domiciliario total en Villarrica. Sin embargo, esta medida cautelar fue apelada por la Fiscalía, y la Tercera Sala del tribunal de alzada acogió la solicitud, revocando el arresto domiciliario y ordenando su retorno a prisión preventiva.
En un video difundido en sus redes sociales, Ojeda criticó duramente esta modificación a la cautelar, argumentando que «en Chile no existe ninguna persona que esté en prisión preventiva en estas materias y en mi causa, con personas que tienen más delitos, más años de prognosis de pena, nadie está en prisión preventiva». Además, señaló que en cuatro oportunidades le han cambiado la medida cautelar, por lo que ha ingresado y salido de la cárcel en varias ocasiones.
Para el diputado, esto «queda absolutamente claro que es un ataque exclusivamente personal y no me cabe ninguna duda de que es un ataque político. No hay ninguna explicación de que a mí se me dé un paso distinto. Eso es desigualdad ante la ley».
En la arista Manicure del caso Convenios se investiga el traspaso de más de $730 millones desde el Gobierno Regional a las Fundaciones Folab y Educc, para realizar cursos para mujeres vulnerables de las comunas de Temuco y Padre Las Casas, los que nunca se ejecutaron.
Pese a su inconformidad, Ojeda ha indicado que «voy a volver nuevamente a la cárcel, como siempre lo he hecho, respetuoso de la institucionalidad, pero espero que las personas que están impartiendo ley, hagan eso, impartan justicia».