En un giro sorprendente, el alcalde de Molina, Felipe Méndez Guzmán, ha tomado una medida drástica contra los funcionarios municipales que abusaron del sistema de licencias médicas. Tras la conclusión de una exhaustiva investigación de la Contraloría General de la República, el alcalde ha ordenado la destitución inmediata de todos los trabajadores involucrados en el escándalo de los «funcionarios viajeros».
Según el informe de la Contraloría, más de 25.000 funcionarios públicos, incluyendo personal del municipio, del Departamento de Salud y de Educación, viajaron al extranjero durante sus licencias médicas, incumpliendo así el reposo indicado. Esta práctica fraudulenta ha llevado al alcalde a tomar una posición firme, buscando marcar un precedente histórico en la comuna de Molina.
La determinación del alcalde no hace distinción alguna, alcanzando incluso a funcionarios de altos cargos directivos, docentes, asistentes de la educación y trabajadores con más de 30 años de servicio. Todos ellos han sido destituidos de sus puestos y, además, inhabilitados por cinco años para ejercer cargos públicos.
Según el comunicado del municipio, esta medida busca enviar un mensaje claro de que no se tolerarán abusos ni privilegios, sin importar el rango o la antigüedad de los involucrados. «Queremos demostrar que en Molina no habrá impunidad para quienes se aprovechen del sistema de licencias médicas», afirmó el alcalde Méndez Guzmán.
Cabe destacar que el informe de la Contraloría reveló que, durante 2023 y 2024, los municipios a nivel nacional pagaron un total de $388.000 millones en licencias médicas, lo que representa un incremento del 321% en la última década. Esto ha llevado al gobierno a implementar nuevas medidas para sancionar el uso fraudulento de estas licencias, incluyendo penas de cárcel.
La determinación del alcalde de Molina envía un mensaje claro: la tolerancia cero ante el abuso de los recursos públicos. Esta acción sin precedentes busca restaurar la confianza de los ciudadanos en la administración municipal y establecer un estándar de integridad que inspire a otras comunas a seguir su ejemplo.
