En un polémico movimiento, la Cámara de Representantes de Estados Unidos, controlada por los republicanos, ha aprobado dos proyectos de ley que endurecen el sistema de justicia juvenil en Washington D.C. El primero de ellos permite que menores de entre 14 y 15 años sean juzgados como adultos por ciertos delitos violentos cometidos en la capital. El segundo reduce la edad máxima para ser considerado delincuente juvenil, de 24 a 18 años.
Los republicanos argumentan que estas medidas buscan frenar la violencia y el desorden que han azotado a Washington D.C. durante demasiado tiempo. El representante Byron Donalds, autor del proyecto que limita la condición de delincuente juvenil, exigió al fiscal general del distrito crear un portal con estadísticas de delitos para respaldar su posición.
Sin embargo, los demócratas han criticado fuertemente estas iniciativas, acusando a los republicanos de exagerar los problemas de delincuencia con fines políticos. El representante Robert García (demócrata por California) declaró de forma sarcástica que si el presidente Trump quiere gobernar Washington D.C., debería renunciar a la presidencia y postularse a la alcaldía.
Esta no es la primera vez que el gobierno federal, bajo el liderazgo de Trump, ha intentado intervenir en los asuntos de la capital. El presidente ha presionado para un mayor control federal sobre Washington D.C. e incluso amenazó con declarar una emergencia nacional para retomar el control de la policía local. Estas acciones han sido criticadas por limitar la autonomía del Distrito, a pesar de que la Ley de Autonomía del Distrito sí permite el despliegue de la Guardia Nacional en situaciones de emergencia.
Más allá de las disputas políticas, la aprobación de estas leyes plantea importantes interrogantes sobre los derechos de los menores, la eficacia de un sistema de justicia más punitivo y el impacto que tendrá en las comunidades más vulnerables de la capital. A medida que el debate continúa, es crucial que se escuchen todas las voces y se priorice el bienestar de los jóvenes y la seguridad de la ciudad.
